La industria exige un mejor acceso a terapias combinadas contra el cáncer

La Asociación Nacional Empresarial de la Industria Farmacéutica en España, Farmaindustria, alerta sobre las dificultades de acceso a las terapias combinadas en cáncer a pesar de tratarse, según afirma el colectivo, de “una de las principales innovaciones terapéuticas que tendrán mayor impacto en 2024”. No en vano, en los próximos cinco años se prevé que se autoricen 68 nuevos tratamientos oncológicos combinados. Para solucionarlo, Farmaindustria aboga por el desarrollo de modelos de financiación sostenibles.

La directora del Departamento de Acceso de Farmaindustria, Isabel Pineros, explica que, más allá de los tratamientos clásicos de quimioterapia, las nuevas combinaciones de inmunooncología, junto con tratamientos dirigidos a genes o proteínas específicos, abordan el cáncer de una manera más personalizada, buscando sinergias entre moléculas y, así, ganarle la partida a la enfermedad. “Cuando hablamos de cáncer, no hablamos de una única enfermedad, por eso muchas veces tendemos a comparar casos o a pensar que debe existir un único tratamiento para todos los pacientes. Pero, a medida que avanza la investigación y se conocen las alteraciones, se va determinando una evolución diferente y, por ello, se necesita un abordaje distinto”, especifica.

El informe Panorama de innovaciones en curso, de la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia), publicado en agosto de 2022, ya se refiere a la importancia creciente que cobrarán las terapias combinadas en 2024, una circunstancia que ha motivado la elaboración del estudio, también de la Efpia, Acceso a las terapias combinadas oncológicas en Europa: retos y soluciones actuales, en el que se subraya un escenario prometedor para estas terapias en un futuro próximo. De acuerdo al documento, se espera que el uso de tratamientos combinados pase del 10 al 20 por ciento en los próximos años. “Hasta hace poco hablábamos sobre estos tratamientos como la oncología del futuro, pero ya están encima de la mesa. Se ha conseguido avanzar en investigación y ahora es necesario hacerlo financiable”, indica Pineros.

Mejorar los modelos de financiación, el gran reto

A pesar de su importancia, estas terapias están quedándose “rezagadas”, tal y como indica la Efpia, en cuanto a sus modelos de financiación. “Si no se adoptan nuevas medidas, se prevé que aumenten las limitaciones en la disponibilidad de tratamientos y sus consecuencias para los pacientes”, reza el informe, que añade: “Si este reto persiste, los fabricantes podrían verse desincentivados a invertir en el desarrollo de terapias combinadas, lo que limitaría el potencial de futuras investigaciones”.

“Se están autorizando en Europa numerosas combinaciones de fármacos que suponen una potenciación en la eficacia frente a la enfermedad, pero no están llegando. Esto supone que tengamos pacientes que podrían tener un mejor abordaje de la enfermedad. Necesitamos que, desde la administración, se establezcan criterios claros que permitan su financiación y puedan llegar sin demora a los pacientes”, lamenta Pineros.

En España, uno de los países donde se ha recabado información para el informe, también existen estas trabas de acceso a las terapias combinadas. El último informe de Indicadores de Acceso a Terapias Innovadoras en Europa (WAIT) confirma las carencias españolas en este sentido. En el periodo 2018-2021, el país contó con una disponibilidad del 57 por ciento de los nuevos fármacos, frente al 61 por ciento del estudio anterior. Además, en otros países del entorno la disponibilidad es mucho más alta, con un 72 por ciento en Francia, un 76 por ciento en Inglaterra, un 83 por ciento en Italia y un 98 por ciento en Alemania.

¿Cómo mejorar el acceso a terapias combinadas?

La portavoz de Farmaindustria señala que una de las opciones que podrían plantearse para aumentar el acceso de España a las nuevas terapias oncológicas sería “establecer unas condiciones de precio y reembolso por indicación, en lugar del modelo actual por medicamento”. “Esta sería la mejor manera de conseguir la financiación de los medicamentos cuando se van a utilizar en monoterapia y también en las indicaciones en las que se necesiten combinarse con otros”, agrega. Pineros confía en el “diálogo” con las administraciones para “encontrar una solución a un problema que afrontan cada vez más sanitarios que quieren prescribir el mejor tratamiento para sus pacientes”.

El informe de Efpia, en la misma línea, resalta la “necesidad social de desarrollar marcos de evaluación y fijación de precios para las terapias combinadas” con el objetivo de “garantizar que los pacientes tengan acceso a ellas en el momento oportuno”. En definitiva, según incide Pineros, de lo que se trata es de “garantizar que los pacientes que lo necesiten puedan acceder a estas terapias”, para lo cual resulta esencial “buscar, junto a todos los agentes implicados, las soluciones con distintos enfoques y la voluntad necesaria, como ha mostrado la industria farmacéutica”.