Guido Rasi, director ejecutivo de la EMA.
10 feb. 2020 17:50H
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Europa descarta liderar cualquier tipo de acción coordinada en la compra de una futurible vacuna contra el coronavirus. Así lo ha confirmado la Agencia Europea del Medicamento (EMA) a Redacción Médica, explicando que “el almacenamiento de medicamentos es una decisión que se toma a nivel de los Estados miembros”.
Por tanto, la Unión Europea no pondrá cotas desde esta institución a un fármaco que se calcula tardará el llegar “entre seis meses y un año”, según pudo conocer este periódico de fuentes sanitarias del Gobierno español.
La medida hubiera podido evitar que los fármacos adquiridos en prevención de una pandemia por este novedoso virus acabaran caducando sin administrar, como pasó con los destinados a la gripe A. Y es que el pasado 19 de septiembre de 2019 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) informó mediante un comunicado que “todos los lotes de Oseltamivir 30mg comprimidos están caducados o próximos a caducar”.
Lo mismo se notificó en la citada nota con “todos los lotes de Tamiflu 75mg cápsulas, Tamiflu 45mg cápsulas y Tamiflu 30mg cápsulas adquiridos con motivo de la pandemia”, que “han caducado ya”. Así como con “todos los lotes de Relenza”que “han caducado ya”.
Fármacos, todos ellos, que se habían adquirido por la Administración General del Estado y las Comunidades Autónomas para hacer frente a la gripe A, y que en su mayoría no se llegaron a utilizar.
Una inversión de 5,9 millones de tratamientos
Hace 10 años, tras un Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud (SNS) en el que asistieron todas las comunidades autónomas, Jiménez anunciaba la decisión de comprar 5,4 millones de tratamientos antivirales en pastillas, aumentando notablemente la reserva total de fármacos contra la gripe A con la que en ese momento contaba España, que se cifraba ya en 10,5 millones de tratamientos antivirales completos. De ellos, 10 millones estaban ya en manos de las comunidades y 500.000 formaban parte de la reserva estratégica del Ejecutivo.
Así, fueron 5,4 millones de tratamientos (y no 3 millones como había anunciado días antes tras Consejo de Gobierno), los que compró Sanidad para reforzar esa reserva estratégica del Gobierno. Tras hacerse efectiva la compra se convirtieron en un total de 5,9 millones de tratamientos para utilizar en caso de que se produjera un repunte de contagios.
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