Una enfermera en un centro sanitario.
La experiencia es una de las claves del éxito en el ámbito académico. En
Enfermería, se estima que la alta exigencia de los estudios y la formación clínica condicionan la vida académica de los estudiantes. Este último punto es algo que, con el paso del tiempo, hace a los
futuros sanitarios más capaces gracias al conocimiento que adquieren, pero al mismo tiempo, repercute en su
estado ánimo.
Ese malestar emocional se traduce en cierto grado de desilusión con el
entorno clínico, debido a factores como el alto número de interacciones con pacientes en un corto espacio de tiempo, que, en muchas ocasiones, sucede de manera dispersa y poco organizada. Este malestar puede repercutir negativamente en el rendimiento académico, según el estudio '
Percepción de los estudiantes de enfermería sobre el ambiente clínico de aprendizaje y su impacto en el ajuste académico: un estudio descriptivo transversal'. Esta investigación demostró que existe una correlación positiva entre la percepción de los estudiantes sobre su entorno de educación clínica y los
buenos resultados académicos.
El estudio contó con 210 participantes, siendo el 51,3 por ciento hombre y el 48,7, mujeres, todos de un promedio de edad de 25 años, todos de una escuela de
Enfermería situada en el noroeste de Irán. Durante su trabajo, los investigadores observaron que cuando los estudiantes veían este entorno como un lugar propicio para el aprendizaje, experimentaban una
mayor capacidad de reacción y adaptabilidad a los retos académicos. Los autores atribuyeron este suceso a factores como la "motivación", un mayor compromiso con las actividades que se desarrollaban y "la disposición a buscar ayuda" cuando se necesita.
Las mujeres consiguen mejores resultados académicos
El estudio también mostró una relación entre el género y el
mundo académico. En concreto, los autores han demostrado que las mujeres tienen una mayor capacidad para responder de manera más efectiva a los
retos académicos.
Según los investigadores, esto podría deberse a las actitudes positivas que las
futuras enfermeras tienen hacia su futuro, mejorando su motivación y compromiso. Entre otros factores, el estudio también menciona que suele haber más redes de
cooperación entre enfermeras que entre enfermeros, lo que les ayuda en su mejor resultado académico.
Otro hallazgo que muestra el estudio, es que existe una relación entre el estado civil y la superación de los
desafíos académicos. Según el estudio, las personas con pareja son menos vulnerables al estrés frente a las solteras, lo que también mejora su capacidad de adaptarse a la
incertidumbre y los
retos.
Medidas para mejorar el entorno clínico
Generar una percepción positiva en el estudiante cuando se enfrenta al
entorno clínico pone sobre la mesa la necesidad de que las instituciones tomen cartas en el asunto para mejorar esta variable y, con ello, los resultados académicos en
Enfermería.
En este sentido, para los autores de la investigación, identificar y abordar estos factores contribuyen a "crear un entorno de aprendizaje más consistente", por ello han recomendado medidas como la realización de talleres para capacitar a los profesores con
métodos de enseñanza modernos. Otras recomendaciones pasan por desarrollar programas de asesoramiento a estudiantes, apoyo psicológico y fomentar un ambiente amistoso en la universidad, procurando conseguir
más motivación y
menos estrés en los estudiantes.
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