Ángel Gabilondo, Defensor del Pueblo, en el Congreso Nacional e Internacional de la Historia de la Enfermería.
Con el fin de crear un espacio plural, investigadores consolidados y noveles de la historia de la
Enfermería, tanto de España como de otras partes del mundo, se han dado cita en el
XVIII Congreso Nacional y XIII Congreso Internacional Historia de la Enfermería, ‘El cuidado enfermero ante la vulnerabilidad y adversidad en la Historia’, organizado por el Seminario Permanente para la Investigación de Historia de la Enfermería (
Sepihe).
En la inauguración de este congreso, que se celebra en la Universidad Autónoma de Madrid (
UAM) del 18 al 20 de abril, ha participado
Jorge Andrada, presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Madrid (
Codem), una de las instituciones colaboradoras, quien ha mostrado su preocupación por el hecho de que cada vez con más frecuencia esta asignatura desaparece de los planes de estudio. Por este motivo insiste en la importancia que tiene la historia enfermera, fundamental para poder conocer el pasado, comprender y valorar el presente y proyectar el futuro.
Otra de las cuestiones mencionadas durante este congreso ha sido el enfoque ‘biologicista’ que está tomando la profesión. A este respecto,
Carmen Sellán, presidenta del Comité Organizador, ha llamado la atención sobre el hecho de que “en lugar de orientar la planificación educativa en Enfermería a la parte
psicosocial seguimos siendo muy
biologicistas” y ha insistido también en que “sin conocer nuestra historia, no podremos contarla a otros. Somos la ciencia del cuidado, pero esto hay que demostrarlo a través de los propios estudios”.
De la misma opinión es
Mari Luz Fernández, presidenta del Colegio Oficial de Enfermeras y Enfermeros de Cantabria, quien igualmente considera que hay un enfoque demasiado ‘biologicista’ y añade que este congreso “es muy importante para nosotros. Una de las cuestiones más difíciles de hacer entender es que estamos en el siglo XXI y somos una
disciplina científica. Hemos hecho del cuidado una ciencia y es importante entenderlo y difundirlo y tiene que hacerse desde el conocimiento histórico”.
Por su parte,
Francisco Javier Castro, presidente de la Asociación Canaria de la Profesión Enfermera, también ha hecho hincapié en que el carácter ‘biologicista’ está muy presente en
Enfermería “y se está perdiendo la parte humana de la profesión. Nosotros tenemos una
visión holística del paciente y lo vemos como un todo. Por eso es muy importante mantener esa visión”.
Sellán también valora muy positivamente la celebración de estos congresos “donde se pone en valor la importancia de la
investigación histórica en Enfermería” y que permite reunir a investigadores ya consagrados y a otros que debutan por primera vez. Sobre este congreso,
Ramón de Gallego, presidente del Sepihe, ha añadido que se han hecho grandes esfuerzos en los últimos años, y ha avanzado que en momentos “nos encontramos en una fase de creación de una
red de investigadores que va a dar grandes frutos. Aquí está el resultado de un gran trabajo que iniciaron un grupo de entusiastas investigadores como Carmen Sellán, entre otros”.
Una profesión fundamental en el cuidado de la Humanidad
Jorge Andrada, por su parte, ha indicado en su intervención que “desde el punto de vista del
cuidado humano, esencia de nuestra disciplina, existe un elemento axiomático que permite dar cuenta, justificativa, del hecho histórico en sí: la
evidencia inequívoca y manifiesta de que el cuidado genera memoria. Y así, es en la historia y en la memoria, donde se asienta la identidad de una
profesión”.
Los expertos reunidos en esta jornada coinciden con Jorge al referirse a Enfermería como la
profesión de los cuidados por excelencia, motivo por el que también han pedido mayor reconocimiento para la labor que realizan las enfermeras y los enfermeros, en un momento en que ha aumentado la
esperanza de vida y los ciudadanos necesitan más recursos, como han apuntado
Eva García, vicepresidenta primera de la conferencia de decanos y decanas de Enfermería, y
Amaya Mendikoetxea, rectora de la
Universidad Autónoma de Madrid, sede de este congreso.
García ha aprovechado su intervención para agradecer a los asistentes su presencia y, sobre todo, “el esfuerzo de los
profesores, en un momento difícil para la profesión”. Y ha tenido también palabras de reconocimiento para “muchas enfermeras que han conseguido mucho con su tesón”. La rectora de la UAM también ha mencionado el importante legado de la
profesión Enfermera y ha querido elogiar la vocación y la capacidad de superación de las enfermeras y los enfermeros, “sobre todo en situaciones como la vulnerabilidad y la adversidad en la historia”.
El encargado de impartir la conferencia inaugural,
Ángel Gabilondo, Defensor del Pueblo, se ha referido a Enfermería como un modo de conocimiento que se refleja en la actividad que realizan sobre la salud de las personas y que merece mayor reconocimiento social.
Este congreso, en definitiva, tiene el objetivo de poner en valor la Enfermería y las contribuciones que la profesión ha propiciado a lo largo de su historia y servir de espacio plural para compartir experiencias y confrontar ideas de un modo abierto y participativo por parte de todos los asistentes, para conocer y compartir el pasado de la profesión para entender y mejorar su presente.
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