Diccionario de enfermedades

Vacuna triple vírica

¿Qué protege la vacuna triple vírica?

¿Qué es la vacuna triple vírica?


La vacuna triple vírica es una vacuna que contiene virus vivos atenuados (tratados para que no sean agresivos) de sarampión, rubéola y parotiditis, capaz de producir anticuerpos (defensas) en personas sanas y así evitar la enfermedad.

¿Qué protege?


Protege frente a tres enfermedades por virus con un solo pinchazo:
  • Sarampión. Es una enfermedad que cursa con fiebre alta y sarpullido por todo el cuerpo, tos muy intensa y conjuntivitis (ojos rojos). El sarampión es una enfermedad grave porque puede complicarse con neumonía (infección en el pulmón), otitis o afectación del cerebro.
  • Rubéola. Es una enfermedad que cursa con febrícula, ganglios en el cuello y sarpullido por todo el cuerpo. Es una enfermedad grave en las embarazadas ya que puede afectar al feto y producirle una rubéola congénita, asociada a malformaciones graves.
  • Parotiditis (paperas). Es una enfermedad que cursa con febrícula e inflamación de las parótidas (unas glándulas salivales). Puede complicarse con meningitis (inflamación de las envolturas cerebrales) u orquitis (inflamación de los testículos).

¿Cómo se contagian el sarampión, la rubéola y la parotiditis?


Las tres enfermedades se contagian por vía aérea, por contacto directo con un enfermo a través de la saliva infectada al toser o estornudar.

¿Quien debe vacunarse?


La vacuna triple vírica está incluida en el Calendario Vacunal Español y deben recibirla todos los niños según esté incluida en los diferentes calendarios de las distintas Comunidades Autónomas españolas.
En situaciones de riesgo, por ejemplo ante una epidemia de sarampión o rubéola, que ocasionalmente ocurren en nuestro país, puede ser necesario adelantar la vacunación en los menores de un año. En estos casos, se considera una dosis vacunal extra, continuándose posteriormente la vacunación con la pauta indicada. De todas formas, siempre se debe consultar con el pediatra. La vacuna de la rubéola también puede ser administrada a cualquier persona que se suponga que es vulnerable a esta infección fuera del embarazo.

¿Por qué es importante vacunarse contra el sarampión, la rubéola y la parotiditis?


Si bien estas infecciones son actualmente infrecuentes en nuestro país, aún existen en países menos desarrollados. Dado el continuo flujo de personas procedentes de otros países hacia el nuestro, es necesario mantener a nuestra población protegida frente a una enfermedad importada. La vacuna actual es segura, muy eficaz y con pocos efectos secundarios.

¿Cómo se administra la vacuna triple vírica?


La vacuna triple vírica debe administrarse siempre por vía intramuscular, en el muslo en los niños menores de 1 año y en el brazo en los mayores.

Puede administrarse simultáneamente o con cualquier intervalo de tiempo, antes o después, que vacunas inactivadas. Lo único que debe ser tenido en cuenta es evitar vacunar en la misma región anatómica en intervalos inferiores a 7-15 días.

La vacuna triple vírica debe administrarse simultáneamente o con un intervalo de 30 días respecto a otras vacunas atenuadas que se administren mediante inyección. Las vacunas atenuadas de administración oral no generan ningún conflicto en este sentido.

¿Qué hacer si se ha olvidado una dosis?


Si se ha olvidado una dosis de la vacuna triple vírica se debe poner la dosis que falta. No es necesario iniciar de nuevo la vacunación completa con las dos dosis.

Contraindicaciones de la Triple Vírica


Las contraindicaciones de la vacuna triple vírica son las generales de todas las vacunas:
  • Alergia a algún componente de la vacuna. Los antecedentes de hipersensibilidad a las proteínas del huevo no son una contraindicación formal.
  • Embarazo. La vacuna triple vírica no debe ser administrada a embarazadas. Las mujeres fértiles recién vacunadas deben adoptar medidas para evitar el embarazo en los 30 días siguientes a la vacunación. La vacunación inadvertida de embarazadas no se considera criterio de aborto terapéutico ya que el virus que se utiliza en la vacuna no causa el síndrome de la rubéola congénita.
  • Pacientes con defensas bajas. La vacuna triple vírica, al igual que otras vacunas atenuadas, está contraindicada en personas con defensas bajas. En los pacientes que toman medicamentos para bajar las defensas, la vacunación debe retrasarse hasta los 3 meses de haber finalizado el tratamiento. En los pacientes con infección por el VIH, la vacuna sólo está indicada si el nivel se linfocitos CD4 es superior al 15 %.
  • Inmunoglobulinas, transfusiones y otros derivados de la sangre. La respuesta a la vacuna puede ser menor si se han recibido derivados de la sangre en los 3 meses previos. También pueden interferir en la respuesta si se administran en las 2 semanas posteriores a la vacunación.


¿Qué efectos secundarios puede tener la vacuna triple vírica?


En general la vacuna triple vírica es una vacuna muy bien tolerada; los efectos adversos suelen ser leves y menos frecuentes tras la segunda dosis:
  • Dolor o enrojecimiento en la zona de la inyección.
  • Fiebre (1 persona de cada 6 vacunados) a los 5-12 días de la vacunación que dura 1 ó 2 días (máximo 5); en estos casos se administra paracetamol o ibuprofeno.
  • Erupción en el cuerpo (1 persona de cada 20 vacunados) a los 7 – 15 días de la vacunación.
  • Inflamación de los ganglios del cuello (raro).
Los efectos adversos moderados incluyen:
  • Convulsiones febriles (1 de cada 3.000 vacunados).
  • Dolor y rigidez en las articulaciones (rodillas, muñecas y dedos), sobre todo en adolescentes y en mujeres (1 de cada 4 vacunados).
  • Disminución transitoria de las plaquetas (trombopenia) que podría causar sangrado (1 de cada 30.000 vacunados).
Los efectos adversos graves son muy raros e incluyen:
  • Reacción alérgica grave (menos de 1 de cada 1.000.000 vacunados).
  • Alteraciones tan raras que los expertos no pueden asegurar que sean debidas a la vacuna:
  • Sordera.
  • Convulsiones a largo plazo, coma o disminución del nivel de conciencia.
  • Daño cerebral permanente.
Está ampliamente demostrado que no existe relación entre esta vacuna y el autismo, la artritis crónica, las enfermedades reumatológicas, la meningitis aséptica, las alteraciones del cerebelo o la enfermedad de Crohn.

¿Cuándo no se debe vacunar?


No se debe vacunar con la vacuna triple vírica cuando haya sucedido previamente una reacción alérgica grave con una dosis anterior de vacuna o cuando se padezca una enfermedad importante. Tampoco se recomienda vacunar a niños con enfermedades asociadas con defensas bajas. Ante una enfermedad común leve no se debe retrasar la vacunación.

¿Cuando consultar con el pediatra después de la vacunación?


Se debe consultar con el pediatra después de la vacunación con la triple vírica siempre que surja alguna reacción grave, fuera de lo normal, como la aparición de fiebre muy alta o cambios del comportamiento después de la vacunación. Las señales de una reacción alérgica grave suelen ser: dificultad para respirar, ronquera, pitos en el pecho, ronchas y enrojecimiento de todo el cuerpo, debilidad, latidos muy rápidos del corazón y mareos. En estos casos debe consultarse inmediatamente con un médico. En algunos casos se ha descrito disminución importante de las plaquetas tras la vacunación (trombopenia); en estas situaciones se valorará la posibilidad de no administrar más dosis de vacuna.

La vacuna triple vírica contiene huevo. Si el niño es alérgico a dicho alimento, debe comunicárselo a su pediatra para que valore la situación aunque, salvo que la alergia sea severa (anafilaxia), podrá vacunarse.

¿Se puede vacunar con la vacuna triple vírica a un niño cuya madre está embarazada?


Sí, no supone ningún riesgo. Aunque la mayoría de los vacunados con la vacuna triple vírica excretan pequeñas cantidades de virus en las gotitas de saliva, nunca se ha producido un contagio.

¿Puede ser vacunado de triple vírica un niño con tuberculosis?


Sí, ya que aunque el sarampión natural puede empeorar la tuberculosis no ocurre lo mismo con la vacuna triple vírica. En caso de hacer la prueba de la tuberculina, ésta debe realizarse el mismo día de la vacuna o, si no, ha de retrasarse de 4 a 6 semanas debido a que la vacuna puede suprimir temporalmente la respuesta a la tuberculina.

¿Se puede administrar a personas que tengan contacto con una persona con defensas bajas?


Sí, ya que las personas vacunadas con la vacuna triple vírica no transmiten ninguno de los virus atenuados de la vacuna. Es más, es conveniente vacunar a los contactos cercanos a pacientes con defensas bajas para disminuir el riesgo de exposición a los virus naturales (especialmente el del sarampión).

Si el niño ya está vacunado frente a uno o dos de los componentes de la triple vírica, ¿hay algún problema por vacunarle de nuevo de esas enfermedades?


No,  no hay ningún problema.

¿Hay más casos de parotiditis en la Comunidad de Madrid por una vacuna defectuosa? ¿A quién afecta? ¿Qué deben hacer los afectados?


En la Comunidad de Madrid se ha detectado un aumento de casos de parotiditis que está afectando a:
  • el grupo de población que no ha recibido 2 dosis de vacuna triple vírica con el componente frente a la parotiditis.
  • el grupo de población que, habiendo recibido 2 dosis de vacuna triple vírica con el componente frente a la parotiditis, una de ellas contenía la cepa Rubini (Triviraten, distribuida por Berna) frente a la parotiditis, de menor efectividad y que fue retirada del mercado español.
Por este motivo las autoridades sanitarias de la Comunidad de Madrid han recomendado revisar el estado de vacunación de los siguientes grupos de edad:
  • Los nacidos entre el 1/1/1995 y el 31/12/1998.
  • Los  nacidos entre el 1/1/1985 y el 31/12/1988.
En estos grupos se debe reforzar la vacunación cuando hubieran recibido la vacuna de menor efectividad o cuando no tengan documentada su vacunación. El refuerzo de la vacunación de realizará en sus centros correspondientes de Atención Primaria.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.