Orfidal

El orfidal es un tranquilizante-ansiolítico que evita el nerviosismo y la ansiedad, y que actúa sin afectar las actividades normales de la persona, según la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). Se trata de un medicamento destinado para aquellos individuos diagnosticados con "episodios de ansiedad" y que debe usarse "en momentos puntuales" para el alivio a corto plazo de sus síntomas, según la psiquiatra del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y coordinadora de Urgencias del mismo centro hospitalario, Isabel Morales.

El orfidal, nombre comercial del Lorazepam, se puede utilizar para tratar otras patologías, como el síndrome del intestino irritable, la epilepsia y el insomnio, así como las náuseas y vómitos provocados por el tratamiento del cáncer o la agitación motivada por la abstinencia del alcohol. Como fármaco perteneciente al grupo de las benzodiazepinas, sus propiedades son las de ansiolítico, sedante, relajante muscular, anticonvulsivo y amnésico.

Uso del orfidal

Morales destaca que el orfidal "siempre debe estar prescrito por médicos", entre ellos psiquiatras, y se debe hacer seguimiento del consumo que realice el paciente porque "tiene riesgo de adicción si se mantiene mucho tiempo". Además, la coordinadora de Urgencias apunta que hay algunos colectivos según su rango de edad a los que no se puede suministrar, porque puede acarrear "problemas cognitivos, especialmente a las personas mayores".

En ese sentido, la información de la Aemps recoge que el orfidal se usa para el tratamiento a corto plazo de todos los estados de ansiedad y tensión, asociados o no a trastornos funcionales u orgánicos, incluyendo la ansiedad asociada a depresión y la ligada a los procedimientos quirúrgicos y/o diagnósticos, y en preanestesia; así como en trastornos del sueño.

Se recomienda que el orfidal sea consumido por periodos cortos de dos a cuatro semanas por el riesgo que puede conllevar el consumo a largo plazo. En cuanto a su administración, esta se puede dividir en dos a cuatro tomas diarias. La dosis que se aconseja en adultos es de 3 miligramos de orfidal al día como máximo. Cabe destacar que cuando se administra por vía oral, la mayor concentración se alcanza a las dos horas.

Principio activo y usos no recomendados

"El principio activo de orfidal es Lorazepam", explica Morales. En cuanto a su uso, no se deben tomar este medicamento las personas alérgicas a benzodiazepinas (el grupo de medicamentos al que pertenece lorazepam); los individuos que han sido diagnosticados de Miastenia gravis, si se padece insuficiencia respiratoria severa, si se tiene apnea del sueño y si se tiene una enfermedad grave del hígado.

Efectos secundarios del orfidal

Los efectos secundarios del orfidal más comunes son la somnolencia, la fatiga y sensación de ahogo. Otros de más ocasionales son la visión borrosa, la reducción del estado de alerta y la ansiedad, que se produce como efecto de rebote.

Considerados como raros, constan como efectos secundarios de este medicamento la agitación y las erecciones, mientras que los muy raros (registrados en menos del 0,2 por ciento de los casos) son: trombocitopenia, elevación de globulina, hiperbilirrubinemia, hiponatremia y elevación de enzimas transaminasas.

Consumo de orfidal y alcohol

"El orfidal es un ansiolítico que no debe tomarse junto al alcohol", detalla la psiquiatra del Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Morales apunta que el consumo simultáneo de ambos puede provocar una "depresión respiratoria", ya que tanto el orfidal como el alcohol generan relajación en la persona que los consume. "La toma conjunta de ambos puede conllevar efectos adversos", advierte.

Además, la especialista incide en que el orfidal debe estar prescrito por un médico y debe hacerse seguimiento por "el riesgo de dependencia" que puede provocar en los pacientes.

Por otra parte, Morales asegura que este medicamento "no tiene efecto en el peso, ni ganancia ni disminución", además de hacer hincapié en sensibilizar a la población sobre el consumo de orfidal. "Está muy banalizado y la gente lo usa en el día a día. Hay momentos y situaciones que se debe prescribir este tipo de medicación, pero no tomar regularmente sin control", agrega.

"Es importante que la gente sea consciente que el consumo de orfidal debe estar prescrito, para los momentos en que esté indicado, y hacer seguimiento", concluye Morales.


Isabel Morales, psiquiatra en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón y coordinadora de Urgencias.