*Jesús Sánchez Martos es catedrático de Educación para la Salud de la Universidad Complutense de Madrid
Es fundamental que todos, profesionales sanitarios, políticos y periodistas, seamos capaces de transmitir serenidad a la población general ante las noticias de que las farmacias de la mayoría de las Comunidades Autónomas están desabastecidas de vacunas contra la varicela, porque no tiene nada que ver con problemas de seguridad, de eficacia, de calidad, ni de falta de producción o de stock suficiente. Por lo tanto “no hay motivo de alarma social” en ninguno de los casos. Se trata una vez más de un problema de comunicación y de falta de entendimiento entre la industria farmacéutica, en este caso Sanofi Pasteur MSD, que comercializa Varivax y la Agencia Española del Medicamento del Ministerio de Sanidad.
Desde hace años somos muchos, afortunadamente cada vez más, los que abogamos por un “calendario de vacunación único” para todo el territorio nacional, algo que parece imposible y que desde luego no alcanzo a entender , sencillamente porque no hay argumentos en contra de esta idea. Hoy, disponemos en España de diferentes “calendarios de vacunación” dependiendo de la Comunidad Autónoma de que se trate y esto, además de ser un verdadero problema de Salud Pública, únicamente contribuye a aumentar la confusión entre los ciudadanos. Pensemos en unos padres, que por motivos laborales han de trasladar su residencia a otra Comunidad…¿saben que es lo que tienen que hacer con el cumplimiento de las vacunas para sus hijos? ¿Por qué no disponemos de un calendario único para todos?
El pasado 21 de Marzo se aprobó por fin, ese calendario único por parte del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud con el fin de garantizar una igualdad y una equidad en la Salud Pública de todos. De acuerdo a los informes presentados por su Consejo Asesor de Vacunas, la vacunación contra la varicela se establecerá a partir del 1 de enero de 2014, y en todas las Comunidades Autónomas, en la pubertad con una horquilla entre los 10 y los 12 años de edad. Entonces…¿dónde esta el problema que tenemos ahora con el desabastecimiento de las vacunas contra la varicela en una gran mayoría de Comunidades Autónomas?
En el momento actual, solo Madrid, Navarra, Ceuta y Melilla, tienen incorporada esta vacuna para los niños pequeños, con una dosis a los 12-15 meses y la segunda a los dos años. El resto de Comunidades, también la tienen incorporada en sus calendarios de vacunación, financiada por el Sistema Público, pero para los niños que cumplan 10-12 años con una segunda dosis al mes de la primera. Pero si un pediatra no está de acuerdo con esta disposición y la receta para un niño de menos edad, se puede comprar en la farmacia. En otras palabras, en esas Comunidades, si los padres quieren vacunar a sus hijos contra la varicela antes de los 10-12 años, tienen que pagarla de su bolsillo, siempre que cuenten con la necesaria e imprescindible receta de su pediatra. Pues bien, ahora, y según se desprende de las quejas formuladas por un gran número de farmacias y por muchas Comunidades Autónomas, según parece esas vacunas no llegan a las farmacias por lo que los padres no pueden comprarlas y por ende no pueden vacunar a sus hijos, al menos hasta que cumplan 10 ó 12 años.
Sanofi Pasteur MSD asegura que no existen ningún problema de falta de producción ni de falta de stock y que ellos disponen de todas las vacunas necesarias, mientras que la Agencia Española del Medicamento asegura que “el suministro de vacunas contra la varicela es el adecuado de acuerdo a las necesidades del cumplimiento del calendario vacunal que cada Comunidad Autónoma tiene aprobado y publicado en el momento actual y sobre el que existe un acuerdo, consensuado en 2005, del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud”, y aseguran que desde el Ministerio de Sanidad no se ha dado ninguna orden para cortar el suministro de esa vacuna a las farmacias.
La varicela es una enfermedad benigna en la infancia pero puede ser peligrosa ante un posible embarazo, razón por la que cada vez más expertos piensan que la vacuna se debería administrar a partir de los 10 ó 12 años. Otros sin embargo, piensan que si retrasamos la vacunación hasta los 12 años, ya no sería necesaria en muchos casos, porque la mayoría de los niños ya habrían pasado la enfermedad, y pasar la varicela nos inmuniza para siempre aunque no en todos los casos. Un nuevo despropósito de la falta de entrenamiento en comunicación eficaz de todas las partes, la propia Industria Farmacéutica, los políticos y los expertos en Epidemiología, Salud Pública y Vacunología, que hasta ahora no han sido capaces de ponerse de acuerdo en la edad más conveniente para vacunar a nuestros niños contra esta enfermedad.
En fin, seguro que este tema será otro “Guadiana” de la Salud Pública, y que pronto pasará, por lo que como digo no existe ningún motivo de alarma. Se trata de una vacuna con una eficacia del 80-85%, totalmente segura y de calidad, y que si un pediatra, sea de la Comunidad Autónoma que sea, emite un informe recomendando la vacuna para un niño que tenga un determinado riesgo (enfermedades con inmunodeficiencia, neumopatías, bronquiolitis, asmáticos, etc.), se le administrará sin problema alguno. Y yo creo que esto es lo más importante, ¿no les parece?
De todos modos, aun tenemos una asignatura pendiente todos, ciudadanos en general, políticos y profesionales sanitarios en particular: los calendarios de vacunación se aprueban para cumplirlos, sencillamente porque las vacunas deben ser entendidas como la verdadera estrategia de la Medicina Preventiva, y de la Salud Pública. El hecho de vacunar a nuestros hijos es un derecho, pero también un deber y una verdadera co-responsabilidad social para todos, porque vacunando a nuestros hijos según nos recomiendan los expertos, podremos conseguir reducir el número de enfermedades de forma global y no solo individual. Ahora, tendremos que esperar al próximo 1 de Enero, que es cuando entrará en vigor el nuevo Calendario de Vacunación aprobado por todas las Consejerías de Sanidad de todas las Comunidades Autónomas, y ver si de una vez por todas se cumple y se garantiza la equidad para todos en nuestro Sistema Nacional de Salud, al menos en esta importante cuestión.