En los últimos años se ha comprobado que el
consumo de ibuprofeno ha aumentado entre la población, pero es ahora cuando, además de los riesgos para la salud que comporta, se han detectado otros efectos adversos. En concreto, para los primeros peldaños de los ecosistemas marinos.
Así lo ha detallado un estudio del Instituto de Estudios Ambientales y Recursos Naturales (
i-UNAT) de Las Palmas de Gran Canaria publicado en
Science of the total Environment y que recoge
EFE. Los investigadores han llevado a cabo
mediciones quincenales durante seis meses de cada litro de aguas residuales de una depuradora, donde se han encontrado microgramos de fármacos o metabolitos de más de una veintena de compuestos, como antibióticos, antidepresivos, antiinflamatorios, medicamentos contra el colesterol o protectores estomacales, entre otros.
Estos nuevos datos sobre los riesgos del ibuprofeno vienen a aumentar la alerta que ya pesa sobre el medicamento por los problemas de salud que conlleva. Precisamente estos días se ha conocido también un
estudio de la revista científica The BMJ que señala que además del riesgo cardiaco ya conocido, el ibuprofeno provoca este peligro ya en la primera semana de consumo.
Los valores de ibuprofeno afectan a algas, crustáceos y peces
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La población analizada del sureste de Gran Canaria, según los cálculos, vierte cada día algo más de un kilo de medicamentos y residuos de éstos diluidos en la orina, siendo las
mayores concentraciones las de cafeína e ibuprofeno. Pese a destacar que las depuradoras actuales son muy eficientes eliminando estos compuestos, los investigadores afirman que una parte de los mismos se libera al medio ambiente.
“Y se ha demostrado que la exposición continua a trazas de ciertos fármacos provoca consecuencias inesperadas y efectos no deseados en los ecosistemas”, resaltan
Cristina Afonso, Zoraida Sosa y José Juan Santana, autores del estudio.
Estos compuestos suponen un riesgo para tres tipos de seres vivos; las algas, unos pequeños crustáceos llamados dafnias y los peces. Esto se debe al valor denominado RQ, que marca cuándo un compuesto es inofensivo (por debajo del 0,1) y cuándo es un peligro (por encima del 1,0).
“La mayoría de compuestos estudiados no representa un riesgo significativo porque su RQ está entre menos de 0,001 y 0,077. Sin embargo, el gemfibrozilo (un anticolesterol), el
ibuprofeno y el ofloxacino (un antibiótico) generan un
riesgo significativo para determinados organismos, con valores RQ superiores a 1”, señalan.
El riesgo del ibuprofeno, en el caso de las personas, está en que se acaba de demostrar que su abuso
aumenta un tercio las posibilidades de sufrir un infarto.