Hiedra García Sampedro.
Los decanos de Medicina han reiterado la necesidad que tienen de trabajar con el Ministerio de Sanidad “en varios frentes”, según ha comentado a Redacción Médica el presidente de la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina, Ricardo Rigual. Uno de esos frentes es lograr el continuo formativo, no solamente adecuando las plazas en universidades con la oferta de médicos internos residentes, sino a nivel de la prueba de acceso MIR, “para que se evalúe aquello que nosotros estamos enseñando”, asegura Rigual.
Antonio Lorenzo, decano de la Facultad de Medicina de Cádiz; Eduardo González Mazo, rector de la Universidad de Cádiz, y Ricardo Rigual, presidente de la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina.
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“Debemos establecer unas relaciones estrechas con el Ministerio de Sanidad para que la forma de acceder a la formación especializada suponga un continuo”, subraya el presidente de los decanos, que se han reunido durante este fin de semana en Cádiz, una convocatoria que ha contado con la presencia del presidente del Foro de la Profesión y de la Organización Médica Colegial, Juan José Rodríguez Sendín, y con el secretario general de Universidades, Federico Morán.
En esta reunión, los decanos de Medicina han afianzado la estructura de la prueba ECOE que se realiza al final del Grado. Prácticamente todas las facultades presentan una ECOE articulada con los requisitos que se han marcado entre todas (públicas y privadas); en este sentido, las que tienen más experiencia están “ayudando” a las demás para “converger todos en una prueba común de calidad”, según Rigual. Los decanos se ofrecen a trabajar “con quien llame a la puerta” para que esta ECOE acreditada por la Conferencia pueda servir “para otras cosas”, por ejemplo, como parte de la valoración para el acceso al MIR. “Lo importante es que tenemos algo que está bien estructurado y homologado, ya veremos para qué puede servir en el futuro”, asegura Rigual.
En cuanto al reconocimiento del nivel de máster para los grados en Medicina, los decanos han establecido, “un proceso sencillo y retroactivo” para que las facultades vayan presentando su documentación.
Normativa hospital universitario
Otro frente de los decanos es trabajar para actualizar la normativa del hospital universitario, un proyecto que deben hacer los ministerios de Sanidad y Educación. Es necesario adaptar esta normativa, que data de 1986, a la situación de 2014: a la transferencia completa de competencias sanitarias a las comunidades autónomas, a la reducción de recursos o al aumento de las facultades de Medicina, algunas de ellas muy próximas entre sí.
El aumento de facultades también fue abordado por los decanos, quienes señalan que no es un tema “corporativo” sino que afecta a todo el colectivo médico. Rigual recuerda que la apertura de nuevas facultades “depende de muchos factores” y que no es competencia del Ministerio de Educación ni de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca) que solo se dedican a aprobar sobre el papel la idoneidad de un plan de estudios.
Finalmente, los decanos han denunciado las dificultades que existen para renovar las plantillas docentes. “Necesitamos un número importante de profesores estables”, recuerda Rigual. Las universidades públicas tienen problemas con la tasa de reposición, muy limitada, que les impide renovar el profesorado, mientras que las privadas ven complicado atraer a los clínicos hacia la carrera docente.
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