Redacción. Madrid
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, junto con la directora gerente de la Agencia Antidroga, Almudena Pérez, ha visitado los dos nuevos Centros Residenciales de Tratamiento a Drogodependientes (CRTD) de la Agencia Antidroga. Estos dispositivos proporcionan tratamiento intensivo de desintoxicación y deshabituación a pacientes que no pueden ser tratados ambulatoriamente y precisan de un régimen residencial, así como un centro de día para completar su proceso terapéutico.
El primer Centro Residencial de Tratamiento a Drogodependientes (CRTD1), puesto en marcha hace un año, cuenta con 40 plazas de ingreso, que incluyen plazas para menores de edad, con circuito y espacios independientes, y otras 20 plazas en régimen de centro de día, de modo que puedan recibir tratamiento simultáneamente 60 pacientes. La Comunidad de Madrid destinará, durante los próximos tres años, 8,1 millones de euros para financiar la actividad asistencial de estos centros.
Desde el 1 de marzo hasta el 31 de diciembre de 2012, este Centro ha atendido a 129 pacientes de los que 5 eran menores. Por otro lado, recientemente se ha puesto en marcha el segundo Centro Residencial de Tratamiento a Drogodependientes (CRTD 2) que dispone de 20 plazas de ingreso, las cuales incluyen plazas para mujeres gestantes o con niños menores de tres años, garantizándose el cuidado del menor mientras la madre se encuentra en tratamiento, y otras 20 plazas en régimen de centro de día.
Estos dos Centros Residenciales de Tratamiento de Drogodependientes están ubicados en el municipio de Madrid en un entorno hospitalario e integrados en la Red Asistencial de la Agencia Antidroga. Los centros disponen de los servicios de medicina, psiquiatría, psicología clínica, enfermería y terapia ocupacional y, funciona con arreglo a un proyecto de
Gestión Clínica específico, fundamentado en la consideración de la drogodependencia como una enfermedad y en el tratamiento personalizado, según las características y necesidades del paciente.
Planes terapéuticos individualizados
Los tratamientos se basan en planes terapéuticos individualizados con un enfoque sanitario y atención más intensiva que permiten procesos de recuperación más rápidos, adaptado al nuevo perfil del paciente drogodependiente (en 1990 la heroína aparecía como droga principal de consumo en el 96 por ciento de los casos mientras que en la actualidad la droga principal que motiva el tratamiento médico es la cocaína).
Esta oferta asistencial que tiene como finalidad la desintoxicación, la confirmación diagnóstica en abstinencia, los cuidados y la deshabituación, para pacientes drogodependientes severamente descompensados ofrecen las mismas prestaciones a los menores y a las mujeres, siguiendo los criterios establecidos en el perfil de ingreso, tales como presentar un trastorno de dependencia a una o más drogas, no padecer una patología orgánica que precise atención especializada y prioritaria a la desintoxicación y dar muestras de compromiso con la abstinencia entre otros.
Finalizada la desintoxicación, el paciente puede completar su proceso de deshabituación en régimen de ingreso o iniciar dicho tratamiento en el centro de día y, en otros casos, el drogodependiente puede ser dado de alta y derivado a su Centro de Atención Integral a Drogodependientes (CAID) de referencia para proseguir tratamiento ambulatorio.
Más de 20.000 pacientes atendidos al año
La Red Asistencial al Drogodependiente atendió 22.022 pacientes en el año 2011, de los que el 22 por ciento estaba diagnosticado de patología dual. Un 32 por ciento del total estuvo en tratamiento con sustitutivos opiáceos (metadona). En los recursos residenciales se atendieron 431 pacientes y 330 necesitaron recursos convivenciales de apoyo al tratamiento.
La red asistencial de atención al drogodependiente ha atendido durante el mencionado año en los centros y servicios de inserción, a 412 pacientes que asistieron a aulas educativas y 765 a talleres de capacitación profesional. Por otra parte el centro de orientación socio laboral atendió a 1.063 pacientes, de los que el 30,95 por ciento ha conseguido empleo, cumpliendo así con uno de los objetivos de la Agencia Antidroga como es la reinserción del drogodependiente una vez deshabituado.