Víricö

Una enfermera relata su último servicio en urgencias antes de las vacaciones, con final feliz, eso sí

Urgencias: "Me llama malfollada, a mi compañero gordo y nos desea recortes"
Un servicio de Urgencias de un centro asistencial español.


2 ago. 2019 11:15H
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Prácticamente a diario se tienen noticias de diferentes agresiones a personal sanitario en diversos puntos de la geografía española. En los servicios de urgencias este goteo se intensifica, en medio de una problemática que los responsables médicos y enfermeros llevan tiempo trabajando por intentar solucionar. Una situación que además se agrava por el uso que los pacientes hacen de estos servicios, en ocasiones no urgentes.  

En esta línea se ha manifestado una enfermera de urgencias, que en su perfil en la red social Twitter explica que "hoy ha sido una mañana de no urgencias sin parar. Hasta que ha llegado una de verdad. Y nos hemos puesto a atenderla. Y el que ha entrado hablando por teléfono a gritos me ha dicho que por qué atienden a ese hombre y no a él. Y yo le he explicado después que por criterio", escribe. 

"Ha estado despreciando a todo el equipo. Y hemos llamado a seguridad. Y seguridad ha pasado del tema para variar" 



Este paciente, además, habría estado "despreciando a todo el equipo", motivo por el que han llamado a seguridad, pero ésta "ha pasado del tema para variar". Además, poco después la hija del paciente "de 8 años y todos sus primos" le habrían exigido "lo que le tenía que poner de medicación", pese a lo cual "nadie le hacía caso porque el otro [paciente] se podía morir". 

Esto ha motivado que el paciente en espera se haya dirigido a la enfermera de urgencias en tono soez. "Me ha llamado malfollada. Así con todas sus letras. Y era muy feo sabéis? Y yo he pensado en lo bueno que está mi novio y en lo borde que es la gente. Y lo he ignorado. Y me he reído mucho después con mis compañeras...", continúa su relato, añadiendo que "no le he pinchado yo porque no me parecía necesario".  

Llama "gordo" al compañero y les desea recortes


Por si esta situación no fuera suficiente, el paciente ha llamado "gordo" al compañero de la enfermera. "Y él era muy feo. y muy maleducado. Así que como estoy de vacaciones ya desde las 20.00 reflexiono mucho sobre las palabras feas que dice la gente fea de interior". Como guinda a su discurso de improperios, el paciente "nos ha deseado recortes para que no tengamos trabajo. Y qué feo todo lo que salía de ese ser. Y qué poco urgente estaba", recuerda la profesional sanitaria. 

Sin embargo, la jornada de esta enfermera continuaba atendiendo "3 urgencias reales de verdad y me voy a casa satisfecha y de vacaciones por cierto", algo que le ha provocado pensar que "es imposible irse mal así". 

Compañeros de profesión empatizan con lo vivido


El relato de la enfermera ha provocado numerosas respuestas de compañeros y usuarios, que bien han pasado por lo mismo y la entienden y apoyan, bien lamentan este tipo de actitudes y le desean descanso en esas vacaciones. Un médico de familia le recuerda que "a este tipo de personas no hay que darle ningún tipo de explicaciones. Se llama a seguridad y se le saca. Y se le atiende cuando se pueda". También otra enfermera ha escrito que "ese es el mundo al que nos enfrentamos trabajemos en el centro donde trabajemos, desgraciadamente. Falta educación y cultura...". 

El relato ocurre el mismo día en el que el Sindicato CSIF denunciaba otro caso de violencia contra personal sanitario, después de que un individuo exigiera un tratamiento que no le administrarían hasta tiempo después y empezó a destrozar diferentes estancias de un centro de salud en Marbella y a proferir insultos y amenazas al personal sanitario. 

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