Un extracto del vídeo publicado por Sara López (@sarusqui01).
Casi sin poder gesticular palabra,
Sara López, enfermera, respira profundamente antes de dirigirse a la cámara. “
Tengo que explotar por algún lado”, es la primera frase que suelta en su vídeo de TikTok. Esta sanitaria, con
lágrimas en los ojos y la voz entrecortada, ha resaltado lo que
le encanta su profesión, pero también ha reconocido lo “dura” que se hace en determinados momentos. Especialmente, según ha lamentado entre sollozos, cuando fallece un paciente con el que ha tenido un vínculo profesional.
A pesar de que son los médicos quienes dan este tipo de trágicas noticias, tal y como ha afirmado López a
Redacción Médica, en muchas ocasiones las enfermeras tienen que reafirmar lo explicado por el facultativo porque
los familiares continúan en ‘shock’ y no dan crédito a lo que está ocurriendo a su alrededor. “
Te lo siguen preguntando en bucle porque no entienden que su ser querido ya no esté”, ha detallado.
Estas situaciones
‘rompen’ el corazón de López y, tras vivir recientemente un caso así, no ha podido más y
se ha derrumbado. Aún así, es consciente de que, debido a su profesión,
convive con la muerte cada día en su trabajo y lo tiene, prácticamente, interiorizado. “Pero hay días que se acumulan muchas situaciones de este tipo, y
empiezas a valorar la vida. Que ya lo hacías antes, pero cuando estás todos los santos días viendo cómo se va la gente, y de que eso le puede ocurrir a mi padre, madre o abuelos,
a mí me destroza”, ha argumentado.
De hecho, su labor como enfermera de
acompañar a los pacientes en la muerte y a las familias en el duelo es algo que le llena “muchísimo”. ¿El motivo? Porque siente que es su deber como profesional y que lo tiene que hacer. “Al final
es la última fase de la vida y todos nosotros vamos a pasar por ello. Por eso,
hay que afrontarlo con normalidad”, ha subrayado.
Vínculo enfermera-paciente
Pero esa es la teoría, y otra muy distinta la práctica. Y es que, al haber establecido un
vínculo con los pacientes, y a pesar de que López es consciente de que la defunción es parte de la vida, para ella es “super difícil” ser consciente de que esas personas ya no están.
Por suerte, ha añadido que
no ha vivido la muerte de un familiar cercano, solo falleció uno de sus abuelos cuando ella tenía siete años, pero apenas le conoció y no pudo disfrutar de él. “Los otros tres llevan conmigo desde siempre. Y ahora la aprecio mucho más, me parece una fase muy bonita. Antes yo decía que cuando se fuese alguien yo me moría también, pero ahora estoy entendiendo que es parte de la vida y que
voy a estar con esa persona hasta el final, aunque me duela”, ha concluido.
Afrontar como enfermera la muerte de un paciente
Este vídeo tan emotivo ha llegado al corazón de otras compañeras del sector, quienes han querido mandarle mensajes de apoyo a López. Una de ellas ha sido
Yanira Hernández, sanitaria, quien le ha contado que un médico una vez le dijo que,
si no siente dolor por lo que le ocurre a sus pacientes, entonces es que está en la
profesión equivocada. “Felicidades,
eres una buena enfermera”, ha resaltado.
No ha sido la única que ha opinado sobre este tema.
Aida, también enfermera, ha reconocido que una nunca se acostumbra a este tipo de situaciones. “Muchas veces aguanto el tipo con los familiares y, al salir de la habitación,
me pongo a llorar. Somos humanas Sara y
tenemos la profesión más bonita del mundo”, ha aseverado.
Para concluir, Mirian, quien trabaja también en un hospital, ha explicado que para ella esa es la parte más dura del trabajo. Pero que vivir situaciones tan dramáticas le ha enseñado a afrontarlas, posteriormente, en su vida personal. “Este año que ha
fallecido mi padre he sabido afrontarlo y acompañarle hasta el último momento. Ánimo Sara”, ha terminado.
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