En algunos casos, los facultativos deben emitir 'en tiempo y forma' una solicitud para recibir incentivos que les corresponden.
Los trámites burocráticos siempre han sido un detonante de quejas entre estudiantes, médicos y enfermeras. Aunque la tecnología avance, estos procesos siguen aún siendo un 'quebradero de cabeza' para estos profesionales y un 'coladero de tiempo' a la hora de llevarse a cabo. Esto es lo que opina una médica que ha expresado en X (antiguo Twitter) su desacuerdo ante la necesidad de acreditar de manera manual los méritos laborales para optar a indemnizaciones concretas como los trienios o cualquier otro incentivo ligado a la carrera profesional.
"A mí que me perdonen, pero nunca he entendido por qué tengo que solicitar cosas que deberían estar automatizadas (carrera profesional, trienios) para que me paguen un dinero que es MÍO, es decir, que me lo están dejando de pagar si no lo solicito", ha expresado en su publicación esta especialista andaluza.
"¿Tengo que justificar haber trabajado en el sistema público (además de la misma comunidad) en los últimos cinco años? Otra cosa es la acreditación, que por supuesto que sí", insiste ante la pregunta de una enfermera que insiste en que "
la carrera profesional se debe justificar".
Su reflexión enseguida ha recibido respuestas de otros
profesionales del sistema público que comparten las mismas quejas y se han visto perjudicados ante estas dinámicas. Por ejemplo, hay quienes han explicado que, al olvidarse de solicitar cualquiera de estas prestaciones, han superado el plazo estipulado y deben esperar hasta principios de año para hacerlo, sin un aviso previo que les mantenga alerta: "Es como si hubiera que
solicitar la nómina mes tras mes, un sinsentido", alegan.
Retrasos en cobros de la carrera profesional
Hasta el
post de la facultativa también han acudido compañeros de profesión que, pese a formalizar su petición a tiempo, no han podido recibir el
ingreso correspondiente, ya que la propia Administración ha identificado errores o incongruencias en la misma que los propios trabajadores han de desmentir, empleando meses adicionales de su tiempo que retrasan una vez más el cobro de dicho dinero. También ha habido hueco para la sátira, al enfocar esta dinámica como una paradoja en la que los
sanitarios deben acreditar su antigüedad laboral al mismo organismo para el que trabajan.
Pero hay una conclusión que se repite al 'bucear' entre los comentarios, y es que la situación puede variar en función de la profesión o la comunidad autónoma. Un ejemplo es el de un
profesor de Formación Profesional en las Islas Canarias, que asegura que su historial registra de manera automática algunos de estos méritos antes de compensarlos económicamente. Volviendo al
Sistema Nacional de Salud, un enfermero ha compartido un mensaje parecido, explicando que algunas regiones españolas han implementado cambios en estos procedimientos.
Ingresos de incentivos, una conversación frecuente en plantas y quirófanos
Al leer el hilo de comentarios, también se pueden identificar respuestas de
personal sanitario que ha tratado este tema recientemente con sus
compañeros de trabajo, con los que aseguran que comparten el mismo desconcierto que denuncia la usuaria de X. Otros lo han comentado con sus amigos o familiares, que siendo funcionarios en la misma comunidad pero en otra profesión, también observan diferencias.
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