Elena Pastushenko, PIR en el Hospital Puerta del Hierro.
Elena Pastushenko decidió
abandonar Medicina hace cinco años para embarcarse en otra rama sanitaria:
Psicología. Una decisión de la que nunca se ha arrepentido, todo lo contrario; cada año en el grado le hizo reafirmarse y "estar más segura de haber tomado la decisión correcta".
"Dejé la carrera de Medicina a mediados del segundo año, aunque durante el primer curso ya me planteé varias veces dejarla", cuenta Pastushenko a
Redacción Médica. "Finalmente en el primer año no tomé la decisión porque
me dejé llevar por el hecho de que las asignaturas eran menos 'médicas' y era normal que no me gustasen tanto", añade.
Sin embargo, en el segundo año, "chocó con la realidad". "Me di cuenta que la carrera no era lo que esperaba y no la estaba disfrutando como otros de mis compañeros", señala la psicóloga, admitiendo que "se encontraba mal a nivel emocional y con mucho estrés por todo lo que se exigía en el grado".
"No me parecía que todo ese mal rato fuese a merecer tanto la pena", subraya como la principal razón que le llevó a abandonar dichos estudios.
Pero, ¿por qué se decantó posteriormente por Psicología? "Desde que empecé Medicina me interesó Psiquiatría, ya que siempre me he sentido atraída por los temas de salud mental", comienza explicando, admitiendo que "en ese momento creyó que Psicología podía darle un conocimiento mayor del comportamiento y un enfoque más psicoterapéutico y humano". "Al final,
Psiquiatría solo es una asignatura más en Medicina, mientras que en Psicología tuve más asignaturas directamente relacionadas con la psicoterapia", reconoce Pastushenko a este periódico.
Sobre qué le ha aportado Psicología que no le aportase Medicina, asegura que "a parte de todos esos conocimientos, poder estudiar una carrera que me interesaba
sin excesivas presiones y ver que mi esfuerzo se veía recompensado". "Es algo que considero que suele faltar en carreras que buscan la excelencia: ese ímpetu acaba por dejar a muchos estudiantes decepcionados y con una autoestima muy baja que nada tiene que ver con sus capacidades", añade con respecto a esta cuestión.
'Adiós' a Medicina: "En la carrera se cuida muy poco al estudiante"
"Mi percepción general es que
se cuidaba muy poco a unos estudiantes que se habían esforzado mucho por entrar en Medicina, incluso arrebatándoles la ilusión de ser médicos", admite, aunque reconoce que "no se puede extrapolar a todas las facultades".
Ahora, Pastushenko comienza una nueva aventura. Esta vez laboral. Esta semana empieza su etapa como
PIR en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid. Una formación que la propia psicóloga califica como "muy completa" y que siempre le ha parecido "ideal para ella". "Desde el principio decidí hacer el PIR y darlo todo en los meses de preparación", explica, asegurando que sabía "lo complicado que sería". "Muchas personas lo intentaban durante años antes de conseguirlo y otras muchas lo abandonaban", admite.
"Psicología me ha permitido estudiar
una carrera sin presiones;
algo que suele faltar en los grados
que buscan la excelencia"
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Precisamente, por esa razón decidió "echarle todas las horas que podía, aunque siempre priorizando el descanso cuando estuviese saturada". "No salí contenta del examen, pero días después comencé a darme cuenta que igual no me había salido tan mal", afirma, y confiesa sentirse orgullosa de "haber sacado plaza en su primera convocatoria".
"Es un privilegio haberlo logrado y un sueño", relata.
Por último, Pastushenko admite que
"la terapia es algo muy complejo y que ningún libro te va a enseñar igual que ver a otras personas ejerciéndola". "El PIR te permite, además, contar con supervisión en tus primeros pasos en la profesión", señala.
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