Ángel López Hernanz en su consulta.
La aplicación del Plan para la Renovación de la Atención Primaria en Andalucía ha tenido consecuencias agridulces para
Ángel López Hernanz, médico rural del municipio andaluz de Cañada Rosal. El sistema de clasificación de pacientes junto con la incorporación de un nuevo médico y una enfermera en su pueblo han supuesto que él
se desvincule de cerca de 600 pacientes.
En una
emotiva carta que ha publicado en su blog bajo el
título 'Adiós, paciente, adiós', el galeno asegura que por un lado se siente contento porque tendrá
más tiempo para dedicar a quienes se han quedado con él como titular asignado, pero por otra "tengo un nudo en la garganta por la tristeza de ver que han desaparecido de mi lista de pacientes
personas que llevan confiando en mí como médico 29 años", con el añadido de que muchos de ellos son mayores de 80 años, con la dificultad de explicarles el motivo del cambio, que no se les ha consultado ni a ellos ni al propio médico.
"Han desaparecido de mi lista pacientes que llevan confiando en mí como médico 29 años"
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López Hernanz entiende "la incertidumbre de tener un nuevo médico, tú que no has tenido otro en los últimos 29 años" para quien ha "confiado en mí para no enfermar, para lograr un diagnóstico, para sanar tu enfermedad". Se dirige al paciente a quien "
han cambiado de médico sin consultarte, probablemente un administrativo que no ha visitado el pueblo en más de dos ocasiones, que no te conoce ni sabe nada de tu vida, que no sabe nada de nuestra relación. A ti que dices que volverás a ser mi paciente aunque te cambien, a ti que te da igual el cambio, o que no te importa, o a ti que prefieres conocer un médico nuevo", menciona el sanitario.
El profesional recuerda que todos los
médicos "somos prescindibles" y que llegan a ser en el SNS "casi invisibles", pero la
relación médico-paciente "va más allá de una fría relación laboral o profesional, de una breve consulta sintomática, de un simple acto administrativo, del escueto encuentro para una revisión por el diagnóstico de una enfermedad aguda. Es una
relación sagrada, honorífica, respetuosa, responsable para el médico y confiable, íntimay familiar para el paciente", defiende.
"Te acostumbrarás a él"
Por estos motivos
pide calma al paciente para dar tiempo al nuevo médico de cabecera porque "seguro que ganará tu empatía". López explica que el que viene es un gran profesional y "te atenderá como mereces", aunque todo dependerá también del paciente, de la confianza mutua y del respeto. "
Te acostumbrarás a él igual que lo hiciste conmigo hace 29 años", asegura.
Para vencer la congoja que dice tener por la noticia, este médico rural sentencia la carta asegurando que prefiere quedarse con uno de los mensajes de
WhatsApp que le ha mandado uno de esos pacientes que ya no estarán en su lista: "Ya no vas a ser mi MÉDICO pero
espero que sigas siendo mi AMIGO".
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