MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Bioingenieros de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) han llevado a cabo un estudio, publicado en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences', en el que han confirmado que la rigidez del tejido mamario favorece el desarrollo del cáncer de mama.
El estudio forma parte de un creciente cuerpo de investigaciones que demuestran que las fuerzas mecánicas, no solo las señales genéticas y bioquímicas, desempeñan un papel clave en el desarrollo y la propagación del cáncer.
En el pasado, los investigadores descubrieron que modelar ambientes de tejido rígido 'in vitro' promovía el crecimiento de tumores. No obstante, estos modelos a menudo no recrean completamente lo que sucede en el cuerpo porque son estáticos. "La rigidez de los tejidos es un proceso dinámico, dado que el tejido mamario no solo comienza con rigidez, esto es algo que se desarrolla con el tiempo", han dicho los expertos.
Ante este escenario, los expertos usaron un hidrogel, llamado ácido hialurónico metacrilado, un material suave que puede endurecerse en diversos grados con la exposición a los radicales libres y la luz UV. Primero endurecieron el hidrogel lo suficiente como para imitar la rigidez del tejido mamario normal y, luego, cultivaron células epiteliales mamarias en el gel.
De esta forma, los científicos observaron que después de que las células maduraran la rigidez del gel aumentó a la que tiene un tumor de mama. No obstante, la cantidad de exposición UV requerida en este paso no fue suficiente para dañar las células, si bien descubrieron que la rigidez desencadena múltiples vías que, en conjunto, hacen que las células mamarias se vuelvan cancerosas. Los actores clave de estas vías incluyen las proteínas TWIST1, TGF-beta, SMAD y YAP.
"En un entorno dinámico, encontramos que estas diferentes vías actúan de manera cooperativa. No es suficiente inhibir solo una de esas vías como se mostró anteriormente en estudios de modelado de entornos estáticos y rígidos. Desde una perspectiva clínica, esto sugiere que un enfoque de un solo medicamento puede no funcionar para todos los pacientes con tumores de cáncer de mama", han dicho los científicos.
Finalmente, el equipo también descubrió que una subpoblación de células mamarias no responde a la rigidez, algo que han calificado de "buena noticia" para las mujeres, ya que significa que menos células de las que se creía anteriormente pueden convertirse en cáncer como resultado solo del medio ambiente. Tal resultado, si se traduce en pacientes, podría significar tumores primarios menos o más pequeños.
Esta investigación se realizó principalmente en líneas celulares controladas genéticamente, por lo que el equipo realizará un seguimiento de los estudios sobre líneas celulares derivadas de pacientes.