MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
La incorporación de la inmunoterapia al algoritmo terapéutico de pacientes con cáncer de cabeza y cuello avanzado PD-L1 positivo ha permitido incrementar de forma significativa la supervivencia de estos pacientes, según ha destacado la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) coincidiendo con el Día Mundial del Cáncer de Cabeza y Cuello, que se conmemora este sábado.
En el marco de la campaña 'En Oncología cada AVANCE se escribe en Mayúsculas', SEOM ha dado a conocer la evolución y los avances médicos que se han sucedido en estas últimas décadas en el cáncer de cabeza y cuello, el séptimo cáncer más diagnosticado, con una estimación de unos 10.700 nuevos casos en España en 2024 y 3.660 muertes registradas según el informe 'Las cifras del cáncer en España de 2024' y datos recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE).
En este sentido, en cirugía maxilofacial y otorrinolaringológica se ha evolucionado desde técnicas Hasltedianas hacia reconstrucciones e injertos, así como la aparición de la cirugía robótica, especialmente la transoral, que permite resecciones técnicamente antes inalcanzables. Se han perfeccionado técnicas conservadoras como la laringuectomía supraglótica que permiten mantener la fonación y evitan el traqueostoma.
En radioterapia, se ha avanzado en las técnicas capaces de concentrar dosis con menor toxicidad como la radioterapia de intensidad modulada (IMRT) y se desarrollan técnicas de radiocirugía y de administración de dosis muy fina con tecnologías que permiten una planificación de altísima resolución. Asimismo, se ensayan técnicas de desintensificación para los tumores causados por el VPH.
En la mayoría de los casos de cánceres de estadio I o II, la cirugía o radioterapia es el tratamiento de elección. En tumores localmente avanzados estadio III o IV (M0), el tratamiento es actualmente multimodal, e incluye la cirugía, radioterapia y quimioterapia en función del estadio, localización y factores clínicos. En algunos casos, la quimioterapia de inducción y posterior radioterapia permite la preservación de la laringe.
El tratamiento de pacientes con cáncer de cabeza y cuello localmente avanzado ha evolucionado, y el tratamiento concurrente de radioterapia y cisplatino sigue siendo un estándar en el momento actual.
En el campo de la recurrencia, siempre hay que valorar la posibilidad de tratamiento quirúrgico o radioterápico de rescate en conjunción con quimioterapia o cetuximab. En casos ya irradiados se valorará la reirradiación, pero no siempre es posible un rescate en este momento de la evolución. La selección de los pacientes es la clave para conseguir largos supervivientes, el tratamiento de rescate se indica en función del volumen de la recidiva, el tiempo desde la radioterapia previa y las condiciones basales del paciente.
Con respecto al tratamiento sistémico, la incorporación de cetuximab a la quimioterapia estándar supuso un avance significativo para estos pacientes. En los últimos años los esquemas EXTREME (cisplatino, 5-fluorouracilo y cetuximab) y TPEX (cisplatino, docetaxel y cetuximab) se posicionaron como tratamiento de elección en pacientes con cánceres de cabeza y cuello avanzado. El esquema TPEX se ha establecido como una alternativa menos tóxica al esquema EXTREME y que permite eliminar la bomba de fluorouracilo. ERBITAX (paclitaxel y cetuximab) es una opción terapéutica eficaz en pacientes frágiles no candidatos a cisplatino.