MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Los bebés que ingresan al hospital con bronquiolitis tienen hasta cinco veces más riesgo de sufrir hospitalizaciones de urgencia por asma, sibilancias y enfermedades respiratorias en los primeros cinco años de su vida, según un estudio de investigadores del Imperial College London (Reino Unido) que ha evaluado a 613.377 bebés entre abril de 2007 y marzo de 2008.
La bronquiolitis es un tipo común de infección de tórax que afecta a alrededor de uno de cada tres niños en su primer año de vida, con mayor frecuencia en bebés de tres a seis meses de edad. La afección hace que las vías respiratorias se inflamen y se desencadenen síntomas como fiebre, tos y sibilancias. La mayoría de los niños se mejoran solos, sin embargo, hasta uno de cada 20 (2-5%) requerirá tratamiento hospitalario si desarrollan síntomas más graves, como dificultades para respirar.
La mayoría de los casos de bronquiolitis son causados por el virus sincitial respiratorio (VSR), que es responsable de aproximadamente 3,2 millones de ingresos hospitalarios cada año en todo el mundo. Si bien no existe tratamiento para la bronquiolitis, los niños que se consideran en riesgo de infección por VRS, como los bebés que nacen prematuramente, pueden recibir un tratamiento preventivo llamado palivizumab. También hay una serie de vacunas contra el VRS actualmente en desarrollo.
En su trabajo, publicado en la revista 'Archives of Disease in Childhood', los científicos han revelado que uno de cada cinco niños ingresados en un hospital con bronquiolitis cuando era un bebé tendrá un ingreso hospitalario urgente posterior por alguna de esas complicaciones.
"Sabemos que los ingresos hospitalarios por bronquiolitis han aumentado en los últimos años. Estudios anteriores han sugerido un vínculo entre la enfermedad y un mayor riesgo de afecciones como el asma, pero este es el estudio más grande que sugiere que un caso grave de bronquiolitis puede dar lugar a ingresos urgentes por asma y otras afecciones respiratorias", explica la autora principal del estudio, Helen Skirrow.
Al analizar los hallazgos, el equipo de investigación tuvo en cuenta a los bebés con enfermedades preexistentes pero, en cualquier caso, reconocen que aún se necesita más trabajo para investigar por qué la bronquiolitis puede estar relacionada con problemas respiratorios posteriores en bebés, como el asma.
Una teoría que esbozan es que la infección viral inicial que causó la bronquiolitis puede alterar la respuesta del sistema inmunitario, lo que aumenta la posibilidad de asma y sibilancias subsiguientes. "O puede ser que un bebé permanezca expuesto a los desencadenantes iniciales de la bronquiolitis, como el humo de segunda mano o la contaminación, que posteriormente desencadena el asma u otras afecciones respiratorias", especulan.