VALÈNCIA, 12 (EUROPA PRESS)
Las identificaciones felinas y de hurones con microchip se han disparado un 50% y un 24%, respectivamente, en la Comunitat Valenciana desde la obligatoriedad que estableció la Ley 2/2023 de protección, bienestar y tenencia de animales de compañía y otras medidas de bienestar, publicada por la Generalitat en marzo del año pasado, según la base de datos del Registro Informático Valenciano de Identificación Animal (RIVIA).
Pese a haber vencido el plazo legal marcado, el Colegio de Veterinarios de Valencia (ICOVV) valora positivamente el cumplimiento de la norma en este punto, pero remarca que falta "mayor concienciación" de los beneficios de la identificación tanto para los animales como para sus responsables.
En concreto, entre marzo de 2023 y el mismo mes de este año se han registrado 46.663 nuevos gatos en el conjunto de la autonomía. Ahora bien, según las estimaciones de los veterinarios que colaboran con este registro, son cifras que están muy lejos de acercarse a la población real de felinos.
En el caso de los hurones se han identificado 435 ejemplares domésticos en toda la Comunitat, números bajos para el considerado como el tercer animal de compañía preferido por los valencianos, a considerable distancia de perros y gatos.
"Aun hay un gran desconocimiento de la ley y muchos propietarios no son conscientes de las ventajas de identificar a sus gatos y hurones. Porque aunque no salgan de sus casas, necesitan ser identificados. Los animales pueden escaparse o pueden ser robados y el microchip fundamental para localizarlos", señala la presidenta de la organización colegial, Inmaculada Ibor. Además, llama a identificar a las mascotas para luchar contra las enfermedades.
El Colegio de Veterinarios de Valencia ha promovido una campaña divulgativa de las bondades de la identificación de mascotas, con un decálogo que aporta las razones objetivas por las que conviene que a todas: es un método rápido, seguro y barato; permite recuperar los animales al poco de verse extraviados o robados y luchar contra el maltrato y el abandono; contribuye al control de enfermedades; es condición necesaria para viajar con ellas al extranjero; permite acceder a determinados servicios; da facilidades para algunos trámites administrativos.
La Comunitat Valenciana fue, a través de la Ley 4/1994 ahora derogada por la 2/2023, pionera en la consolidación del chip como mejor método de identificación y registro de los perros. La creación del RIVIA fue un modelo de éxito imitado en buena parte del resto de España.