MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Los trastornos sexuales avisan de muchas enfermedades, por ejemplo la disfunción eréctil es síntoma de cardiopatía isquémica en los hombres, según ha destacado el doctor Luis Ángel Prieto Robisco, médico de familia y sexólogo participante en el XXVI Congreso Nacional de Medicina General y de Familia que concluyó el 18 de mayo en Santiago de Compostela (Galicia).
En este marco, la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) desarrolló una actualización de las disfunciones sexuales más prevalentes en hombres y mujeres. El doctor Prieto fue el encargado de tratar las afecciones más prevalentes en los varones. Entre ellas destacó la disfunción eréctil, los trastornos eyaculatorios, el dolor genital crónico, el hipogonadismo y el priapismo, también llamada enfermedad de la Peyronie.
En cuanto a las mujeres, los trastornos más frecuentes son alteraciones en la fase de deseo, excitación y de orgasmo, que además se ven incrementados durante la menopausia o el climaterio. En este sentido, el experto ha señalado que cualquier tipo de disfunción afecta a la relación de la pareja y una mala relación interpersonal incide de manera negativa en la vida sexual.
De forma paralela, el encuentro también ha tratado de la mano de la doctora María José Castillo Moraga, médico de Familia del Centro de Salud Sanlúcar Barrio Bajo (Cádiz), la manera en la que las enfermedades metabólicas o cardiovasculares, como el cáncer, afectan al ámbito sexual.
De este modo la salud sexual se ha implementado en la sociedad como una de las mayores preocupaciones a nivel de todas las edades. Por ello el doctor ha apuntado que "debe" aumentarse la formación sobre educación sexual en todos los ámbitos, tanto escolares como profesionales. Asimismo, ha destacado que es "esencial" en el nivel de postgrado de futuros médicos para "conocer la anatomía, fisiología, neurología y endocrinología, psicología, antropología y relaciones sociales".
Además, ha pedido aumentar la formación en las edades tempranas con el fin de eliminar aspectos machistas en los colegios y la sociedad. En este contexto, ha concluido que el porno es "el peor educador sexual".