MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
La apnea obstructiva del sueño puede estar relacionada con una baja densidad mineral ósea en adultos, según una investigación dirigida por la Universidad de Buffalo (Estados Unidos).
Estos resultados, publicados en la revista científica 'The Journal of Craniomandibular and Sleep Practice', son cruciales para las personas con apnea del sueño, ya que una baja densidad mineral ósea es un indicador de osteoporosis, una enfermedad en la que los huesos se vuelven débiles y quebradizos.
Además de aumentar el riesgo de fracturas, la baja densidad mineral ósea también afecta a la salud bucodental, provocando que los dientes se aflojen y que fallen los implantes dentales.
Los investigadores utilizaron la tomografía computarizada de haz cónico (CBCT), un tipo de radiografía, para medir la densidad ósea en la cabeza y el cuello de 38 participantes adultos, la mitad de los cuales padecían apnea obstructiva del sueño.
Al controlar la edad, el sexo y el peso, los participantes con apnea obstructiva del sueño presentaban una densidad mineral ósea significativamente inferior a la de los participantes sin esta afección.
La apnea obstructiva del sueño, que se caracteriza por la dificultad para respirar mientras se duerme, puede provocar hipoxia (niveles bajos de oxígeno en el organismo), inflamación, estrés oxidativo y acortamiento de los patrones respiratorios. Cada uno de estos síntomas puede tener un efecto negativo crónico en el metabolismo óseo y, en última instancia, en la densidad ósea.
"Aunque la relación entre la apnea obstructiva del sueño y la baja densidad mineral ósea aún no se ha explorado por completo, este estudio ofrece nuevas pruebas sobre su conexión que podrían tener varias implicaciones para el tratamiento de ortodoncia", ha comentado Thikriat Al-Jewair, uno de los responsables de la investigación.
Si a un paciente se le ha diagnosticado apnea del sueño, esto puede influir en la planificación y gestión del tratamiento. Las imágenes CBCT se han convertido en una parte integral de la práctica diaria de la ortodoncia y podrían utilizarse como herramienta de detección de la baja densidad mineral ósea.
Los ortodoncistas podrían entonces informar a sus pacientes de su propensión a una baja densidad mineral ósea y animarles a consultar más a fondo con su médico, así como advertir al paciente de posibles resultados adversos, mayores riesgos y efectos sobre el tiempo de tratamiento.