BARCELONA, 20 (EUROPA PRESS)
El Hospital del Mar de Barcelona se ha convertido en el primero del país y uno de los primeros del mundo que utiliza la radioterapia para tratar arritmias del corazón, y lo ha probado de momento a un paciente operado en diciembre, según ha informado este miércoles.
La iniciativa es fruto de la colaboración entre los servicios de Cardiología, Oncología Radioterapia y Radiología, y permite tratar a un grupo de pacientes en los cuales las técnicas habituales no tienen éxito y que se pueden ver abocados al trasplante cardíaco.
La aplicación de esta técnica para el tratamiento de las arritmias tiene su origen en Estados Unidos, donde se ha utilizado en una veintena de casos.
Se trata de someter a la zona del corazón donde se origina esta disfunción a una dosis muy elevada de radiación --25 Grays en una sola sesión, cuando lo habitual es una dosis de 2 Grays para tratar casos de cáncer--, para crear una cicatriz en el área y eliminar así la arritmia.
El jefe del Servicio de Cardiología del Hospital del Mar, Julio Martí, ha destacado la complejidad de la técnica, que obliga a un elevado grado de especialización de los profesionales que intervienen.
"Se tiene que trabajar de forma conjunta. En primer lugar, los radiólogos, que son los que obtienen las imágenes, después los cardiólogos, para indicar el punto en el cual se origina el problema, y, finalmente, los oncólogos radioterápicos, que definen el volumen a tratar y cómo hay que hacerlo", ha explicado.
El centro barcelonés es uno de los pocos centros del Estado que puede aplicar esta técnica por el hecho de que su tecnología permite definir el movimiento causado en el corazón y a la respiración y hacer esta intervención sin lesionar otros órganos y estructuras próximas al corazón.
OPERACIÓN DE MEDIA HORA
Se trata de una intervención de media hora ante las más de dos horas de una ablación con las técnicas habituales, que se hace bajo supervisión de un cardiólogo para hacer frente a posibles complicaciones.
Los pacientes que se pueden beneficiar de esta técnica son enfermos con patología epicárdica, es decir, aquellos en los que la arritmia tiene su origen en la zona exterior del músculo cardíaco.
También aquellos con patologías isquémicas en las cuales la lesión se sitúa en la zona externa del corazón, pacientes con afectación cardíaca por enfermedad de Chagas u otras con alguna patología isquémica en fase de cicatriz que afecta al epicardio y a la cual no se puede acceder desde el interior.
Son casos en los cuales esta técnica es la más indicada, ya que, según Martí, "la ventaja fundamental es que la zona que hay que tratar es de difícil acceso mediante las técnicas habituales por cateterismo. Con ella, se puede definir perfectamente el volumen y el área a tratar".
El primer paciente tratado con esta técnica es un hombre de 64 años que sufre una patología cardíaca llamada displasia arritmogénica del ventrículo derecho, en la cual el músculo cardíaco se ve substituido por tejido adiposo, en el cual se producen de forma más fácil arritmias ventriculares.
En este caso, realizado el 21 de diciembre, ya se le había sometido sin éxito, a tres ablaciones para intentar resolver el problema, la última el pasado mes de octubre.
El enfermo llevaba insertado un desfibrilador en el corazón para evitar paradas cardíacas, pero el aparato ya no era útil a causa del daño que la enfermedad había generado en el músculo cardíaco.