MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha calificado como "positivo" que el contagio por COVID-19 sea enfermedad profesional en los sanitarios, pero ve la medida "insuficiente" porque consideran que "debe ampliarse a todos los trabajadores que por su actividad estén en contacto directo con el virus".
El Consejo de Ministros de este martes prevé aprobar esta medida, tras las peticiones de los sindicatos y de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, que aprobó por unanimidad el pasado 22 de diciembre una proposición no de ley (PNL) reclamando este derecho.
"Valoramos que la medida es de justicia para el personal de la sanidad, que sigue en primera línea contra la pandemia en plena tercera ola, y esperamos que este reconocimiento como enfermedad profesional se aplique con efectos inmediatos, con carácter retroactivo, de oficio, a todos los contagiados hasta la fecha. A la espera de conocer el detalle de la norma, desde CSIF estaremos vigilantes para que esta medida se reconozca al conjunto del personal que trabaja en la sanidad, incluido personal administrativo, de limpieza, celadores, entre otros", señala CSIF en un comunicado.
Además, la organización sindical avanza que "seguirá reivindicando que este reconocimiento se amplíe al conjunto de las personas trabajadoras que por su actividad laboral puedan estar expuestas al virus, tal y como marca el Real Decreto sobre enfermedades profesionales (personal expuesto a agentes biológicos), como trabajadores de laboratorios, clínicas dentales, personal sociosanitario, ambulancias o centros penitenciarios".
El reconocimiento de la enfermedad profesional amplía la protección de los trabajadores a efectos de pensiones o indemnizaciones a lo largo de toda la vida, si la enfermedad provoca secuelas o muerte. Hasta ahora, únicamente se consideraba accidente de trabajo con una protección limitada a los cinco años posteriores al contagio.
CSIF fue el primer sindicato que el pasado 5 de marzo solicitó que el contagio por el COVID-19 debía considerarse a todos los efectos enfermedad profesional, tal y como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), y así se lo trasladó a los Ministerios de Sanidad, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y Política Territorial en distintos escritos y a los grupos parlamentarios para que apoyasen su reivindicación.
Además, hicieron llegar su propuesta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una carta enviada el pasado abril, en la que extendieron esta reivindicación al conjunto de las personas trabajadoras que por su actividad laboral estén expuestas al virus.