MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Aldeas Infantiles SOS ha denuncaido que la salud mental infantil es la "gran olvidada" del sistema sanitario español. Por ello, reclaman una mayor inversión, incorporar la especialidad de Psiquiatría Infantil y equipos especializados en el diagnóstico y tratamiento de los efectos derivados del maltrato en la infancia, y medidas específicas para garantizar el derecho a la salud mental de todos los niños, especialmente aquellos vulnerables.
"La prevención y la detección de los factores de riesgo que puedan desencadenar ciertas enfermedades mentales, así como la intervención temprana para evitar que estas se agudicen, es fundamental durante los primeros años de vida", ha asegurado en un comunicado el presidente de la ONG, Pedro Puig, con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra este jueves 10 de octubre.
La ONG reclama "de forma urgente" incrementar los presupuestos destinados a salud mental; impulsar la prevención e intervención temprana para reducir el tiempo que transcurre entre los primeros síntomas y el primer contacto terapéutico; la coordinación permanente entre los equipos de Atención Primaria y los de salud mental; o la incorporación de la especialidad de Psiquiatría Infantil.
También consideran necesarios equipos especializados en el diagnóstico y el tratamiento de los efectos derivados del maltrato en la infancia, así como campañas de sensibilización para informar y combatir el estigma social que recae sobre estas enfermedades.
Según señala la organización, los pediatras "no pueden hacer frente a la demanda desbordante por falta de recursos". "Asimismo, cuando se llega al segundo nivel, el de las unidades de salud mental, reciben a pacientes de todas las edades, sin especialización, por lo que tampoco cuentan con el tiempo, el espacio físico adaptado o la formación necesaria para atenderles adecuadamente", lamentan.
"Esto provoca que las escasas unidades de salud mental para niños y adolescentes estén colapsadas o queden reservadas para casos de especial complejidad, por lo que no se cubren las necesidades existentes. El resultado es una excesiva prescripción farmacológica. Si el sistema sanitario no cuenta con los especialistas necesarios para realizar una adecuada y continuada intervención clínica, se optará, casi en exclusiva, por tratamientos focalizados en los psicofármacos, sin otra intervención psicoterapéutica, dando así una falsa percepción de intervención", agregan.
Una de cada cuatro personas sufrirá una enfermedad mental a lo largo de su vida, una cifra que aumenta en los colectivos más vulnerables. Así, de los casi 48.000 niños que crecen en el sistema de protección en España, es decir, privados del cuidado parental, la mitad de ellos (48,7%) está recibiendo algún tipo de tratamiento de salud mental.
Según indica Aldeas Infantiles SOS, muchos de estos chicos han compartido experiencias traumáticas parecidas durante sus primeros años de vida, desde las negligencias más graves por parte de sus familias, hasta el maltrato físico o psicológico, o incluso el abuso.
"Cuando un niño está expuesto a este tipo de situaciones durante un tiempo prolongado es mucho más fácil que llegue a desarrollar algún tipo de enfermedad mental. El aislamiento social, las quejas somáticas, la ansiedad, la depresión, los problemas de atención o la conducta disruptiva son algunas de las enfermedades que pueden padecer", advierte Puig.