Una ministra "conocedora" del SNS para recuperar a sanitarios 'perdidos'

‘Como agua de mayo’ ha caído entre los sindicatos sanitarios la llegada de la nueva ministra de Sanidad. Al margen de sintonías políticas, las centrales celebran que vayan a reactivarse, de la mano de Mónica García, los trabajos para solventar los problemas que no pudieron abordarse la legislatura pasada con Salvador Illa, Carolina Darias y José Miñones. Redacción Médica ha recogido el ‘sentir’ de los principales responsables sindicales ante la irrupción de la mandataria progresista, una “buena conocedora” de la situación del Sistema Nacional de Salud (SNS) a la que piden “ambición” para materializar reivindicaciones ‘tradicionales’ como las 35 horas y la jubilación anticipada, así como políticas para “recuperar a los profesionales perdidos”.

A grandes rasgos, los sindicatos atisban en la designación de García como ministra de Sanidad una oportunidad para avanzar en algunas de las reivindicaciones que trasladaron, sin efecto, a los anteriores ministros de Sanidad. Entre ellas, la jubilación anticipada, la instauración de las 32 horas y el desarrollo de las especialidades de Enfermería. “No será una tarea fácil, pero es que el Ministerio ha incurrido en una dejación de funciones desde que se aprobaran el Estatuto Marco y la Ley de Cohesión”, indica a Redacción Médica Fernando Hontangas, responsable de Sanidad de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF).

Hontangas valora “muy positivamente” el salto al Ministerio de Sanidad de Mónica García, quien, a su parecer, “conoce perfectamente los problemas que hay” en el sector. “Nos alegramos por el nombramiento; queremos ver a dónde puede llegar más allá de las particularidades del Ministerio”, concluye.

En el mismo sentido se pronuncia el secretario general de la FSS CCOO, Humberto Muñoz, se ha congratulado por el nombramiento de García: “Destacamos, especialmente, que sea una persona que pertenece al sector y lo conoce perfectamente no sólo como profesional, sino en política, ámbito en el que ha defendido la sanidad pública con bastante energía”.

Una legislatura "de diálogo" para los retos de la sanidad

Desde UGT también esperan que la llegada de Mónica García al Ministerio de Sanidad esté marcada por el diálogo, por la negociación colectiva y, sobre todo, por la ambición de conseguir “mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del Sistema Nacional de Salud (SNS)”, tal y como explica Ana Francés, secretaria federal del sector Salud, Sociosanitario y Dependencia de UGT.

Francés asegura que en cuanto el nombramiento de García se oficialice, desde UGT solicitarán una reunión con ella para reanudar las negociaciones que quedaron paralizadas tras el adelanto de las elecciones del 23 de julio. “La cuestión más importante es la reforma del Estatuto Marco”, señala. “Dentro de esta negociación, nos vamos a centrar en la clasificación profesional y la revisión de las funciones” añade. “También le vamos a pedir a esta ministra que asuma la necesaria revisión de la ley de ordenación de las profesiones sanitarias”.

Es lo mismo que reivindican desde CCOO. Aunque no depende en exclusiva del Ministerio de Sanidad, sino también del de Hacienda, Muñoz remarca la necesidad de retomar esas conversaciones y de aplicar los acuerdos ya firmados, especialmente, a través de el Acuerdo Marco para una Administración del XXI. “Entendemos que el adelanto electoral ha podido retrasarlo, pero ya no hay excusas”, asegura.

Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) han reclamado a la nueva inistra un primer encuentro para “abordar los problemas actuales de los médicos que se encuentran a la espera de solución”, que les son “de sobra conocidos”.

“CESM confía en que se puedan recuperar los contactos habituales y necesarios entre ministerio y representantes de los médicos para poder avanzar en medidas que mejoren las condiciones laborales de los profesionales, especialmente en el anunciado plan del Gobierno para acabar con las listas de espera”, señalan desde la central, que, en cualquier caso, ha transmitido a García su disposición a “tender la mano al diálogo y la negociación para encontrar soluciones reales y urgentes” a los retos del Sistema Nacional de Salud (SNS).

“Diálogo y ambición”, las expectativas sanitarias de UGT

Entre las cuestiones primordiales para UGT se encuentra en aumento de profesionales en el SNS, algo que aseguran que solicitarán a la nueva ministra en cuanto se reúnan. “El presidente del Gobierno se comprometió en su discurso de investidura a reforzar el estado de bienestar, empezando por el SNS. Nosotros entendemos que para reforzarlo, lo primero que deben hacer es incrementar el número de profesionales del sistema”, explica. A pesar de que ha habido un aumento en los últimos años, la secretaria del sector Salud de UGT considera que continúa siendo insuficiente “para atender las necesidades de la ciudadanía y para que nuestros profesionales no trabajen con la sobrecarga laboral que tienen en la actualidad”.

Además, Francés ha destacado que otra de las demandas que hará el sindicato será la de aumentar el porcentaje destinado a Atención Primaria. “Vamos a exigir que se destine a este nivel asistencial el 25 por ciento del total del presupuesto sanitario”, indica. “Actualmente, se destina casi un 15 por ciento, pero se necesita un 25 por ciento. Solo así podremos reducir las listas de espera en esta especialidad”, añade.

Otra de sus preocupaciones tiene que ver con la cartera de servicios. “El Gobierno ha hablado de la inclusión de tratamientos bucodentales y oftalmológicos para los jóvenes. Desde UGT vamos a ser ambiciosos y vamos a reivindicar que se incluya la podología y que se refuerce la fisioterapia” declara Francés. 

La salud mental de los sanitarios, en el punto de mira

Francés considera que la Salud Mental se ha vuelto una prioridad para todos. El estrés en el trabajo es una de las cuestiones que más afectan a los profesionales sanitarios. Por este motivo, UGT demanda, como ya ha hecho en otras ocasiones, que las patologías derivadas de los riesgos psicosociales sean consideradas enfermedades laborales para los sanitarios y que ocurra lo mismo con el Covid. “Es una deuda que tienen con los profesionales”, asegura.

Junto a esto, el sindicato pretende reclamar a la nueva ministra de Sanidad que los sanitarios reciban “pagas extraordinarias completas”. También, la jornada laboral de 35 horas semanales sea incluida en el Estatuto Marco y sea de “obligado cumplimiento en todos los servicios de salud”.

Más profesionales para el Sistema Nacional de Salud

Entre las principales demandas de CCOO para los nuevos responsables del ministerio, Muñoz destaca el impulso de “políticas activas para recuperar a los profesionales perdidos”. En este sentido, el secretario general de la FSS CCOO reclama, aunque sin especificar números concretos, más plazas para especialistas de la Medicina y la Enfermería y más plazas en los grados sanitarios en las universidades. “De nada sirve inyectar recursos si no hay profesionales”, subraya.

Precisamente en lo referente a financiación, aunque no dependa directamente del Ministerio de Sanidad, Muñoz reitera que destinar menos del 7,5 por ciento del PIB al presupuesto sanitario “es escaso”. Además, exige que, al menos, la cuarta parte de la partida de políticas sanitarias se dedique a la Atención Primaria. Según afirma, si estas condiciones se cumplieran, España recortaría la “larga distancia” que la separa de otros países del entorno, “más avanzados en cuanto a la financiación en sanidad”.

Por último, Muñoz también valora los avances logrados durante la pasada legislatura en materia de servicios sociales, con el ya exsecretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, al frente, y pide al nuevo ministro del departamento, Pablo Bustinduy, que ese “empuje” no se detenga. “La sanidad es también un asunto de cuidados y avanza cada vez más hacia la asistencia y la dependencia”, manifiesta.