Tomar paracetamol en el embarazo eleva el riesgo de TDAH e insomnio

Uno de los medicamentos que la sociedad toma con más frecuencia es el paracetamol, y actualmente se trata del fármaco más prescrito para embarazadas a nivel mundial. Pese a que los efectos del paracetamol son más leves que la mayoría de los antiinflamatorios, un estudio publicado en la revista PLOS ONE constata que exponer al feto en gestación a este medicamento puede llegar a provocar a futuro trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), retrasos en el desarrollo del lenguaje y tener un menor cociente intelectual.

Un grupo de investigadores de la Universidad de Pennsylvania (EEUU) confirma que los bebés expuestos al paracetamol durante la gestación pueden llegar a sufrir con más frecuencia trastornos del sueño durante los tres primeros años de vida, generando un impacto directo en la maduración cognitiva. Además, también son propensos a sufrir más trastornos de conducta ligados a la hiperactividad.

A través de los datos analizados en el estudio prospectivo 'First Baby Study', realizado a 2.423 parejas madre-hijo/a, se recopilaron datos de la medicación durante la gestación y los posibles trastornos de comportamiento que los niños sufrían al cumplir tres años. Los hijos de las mujeres que consumieron paracetamol mostraron una tendencia más elevada al declarar problemas de sueño y de atención, comparadas con aquellas que no tomaron medicación durante el embarazo.

Tras verificar estos resultados, los autores del estudio advierten que consumir paracetamol puede llegar a afectar negativamente a la neurología prenatal del feto y afectando la capacidad de regulación tanto de la atención como de los ciclos del sueño en la etapa preescolar.

El momento de tomar paracetamol genera varios riesgos

Otro aspecto remarcado por los investigadores del estudio es el momento en que la mujer toma paracetamol durante la gestación. Si se ingiere durante el primer trimestre, puede afectar al desarrollo placentario y fetal, mientras que el uso continuado durante varios trimestres se relacionaría con una mayor incidencia a sufrir TDAH al cumplir los siete años. "Los médicos deberían valorar muy cuidadosamente los pros y los contras de recetar paracetamol a las embarazadas", concluye el estudio.

La precaución en el uso del paracetamol durante la gestación ya ha sido recordada con anterioridad, y el año pasado la revista Nature publicó una declaración de consenso, alertando en el uso del paracetamol durante el embarazo. Entre los efectos secundarios observados se apuntaba el aumento del riesgo de criptorquidia (testículos que no descienden hasta el escroto) o de desarrollo precoz de la pubertad femenina.