Sanidad anuncia cambios en la estrategia de vacunación de MPOX

La nueva variante de MPOX, conocida anteriormente como la viruela del mono, ha puesto en alerta a todo el planeta desde el establecimiento del estado de emergencia de salud pública internacional por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS). España cuenta con experiencia a la hora de tratar la enfermedad, al ser el país con mayor volumen de casos registrados de Europa desde 2022. Por ello, los centros de vacunación ya están preparados para inocular el tratamiento cuando sea necesario. No obstante, el Ministerio de Sanidad ha confirmado que no descarta la implantación de cambios en la estrategia de actuación contra la enfermedad.

La máxima responsable del departamento ministerial, Mónica García, ha señalado en la red social X -antes Twitter- que se podría ampliar las medidas sobre personas que viajen a África, epicentro del brote, al contar con un mayor riesgo de contagio. "Se plantearán nuevas acciones", ha señalado. Se desconoce si se incluirán en el grupo de personas susceptibles de vacunación, en el que se incluyen de momento a individuos que mantienen relaciones sexuales de riesgo, personal sanitario de consultas especializadas y empleados de laboratorio. Por otro lado, si que se descarta en principio llevar a cabo controles fronterizos, pese a que las Comunidades Autónomas han pedido aumentar la vigilancia en aeropuertos.

La ministra de Sanidad ha remarcado que la inoculación de las dos dosis del tratamiento es fundamental, especialmente en personas de riesgo. Los expertos han indicado que la vacunación es la mejor forma de frenar la expansión de la enfermedad y también sus efectos, ya que garantiza una mayor protección ante el desarrollo de un cuadro grave. Y es que la mutación clado Ib cuenta con una letalidad entre el 3 y el 6 por ciento, por encima del 1 por ciento de clado IIb, causante del brote de 2022. 

Reuniones con la Unión Europea y las Comunidades Autónomas

En vistas del aumento de casos y el registro del primer contagio de la nueva variante en Europa -comunicado por Suecia-, la Unión Europea ha convocado a sus miembros a una reunión el lunes 19 de agosto para evaluar la situación actual. Al día siguiente, las Comunidades Autónomas y Sanidad se citarán en la Ponencia de Alertas para valorar las medidas que se deben establecer para combatir la enfermedad. 

De momento, las Comunidades Autónomas han puesto a disposición de la ciudadanía decenas de centros de vacunación para la administración de las dosis. La mayoría se encuentran en los servicios de Medicina Preventiva y el interesado tiene que solicitarlo previamente. Asimismo, las regiones cuentan con equipos de facultativos que revisan si el solicitante cumple los requisitos para recibir el tratamiento o no.

Atención puesta en África

Según datos del Instituto de Salud Carlos III, España ha notificado 264 casos de MPOX en lo que va de año. Una cifra muy por debajo de los más de 16.000 contagios en la República Democrática del Congo, epicentro del brote. Un país que ya ha registrado 548 fallecidos a causa de la nueva variante, la mayoría niños. A su vez, Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda comienzan a registrar un mayor número de infectados por clado Ib.

La gravedad de la situación en el continente africano ha hecho que García haya pedido que la emergencia internacional "se centre en mejorar la situación allí". Es más, ha indicado que ha sido un "error" haber llegado a un escenario de estas características "sin un acuerdo internacional de pandemias que ayude a vehiculizar la ayuda y a prepararse para estas circunstancias de manera global".

Pese a mostrarse prudente, la encargada gubernamental de la cartera de Sanidad ha apuntado a que España y Europa tienen un riesgo bajo de padecer los efectos del brote detectado en África. Precisamente, los diferentes ritmos de vacunación -además de la fortaleza de los sistemas sanitarios europeos- en ambos continentes serían la clave para determinar la gravedad del impacto de la reciente mutación de MPOX en cada territorio.