Rajoy no reconoce ninguna concesión sanitaria de calado para ser investido

Las grandes reformas en sanidad no están sobre la mesa en el futuro pacto de PSOE-C's-PP para conseguir que Mariano Rajoy sea de nuevo investido presidente del Gobierno. Así se desprende del documento que los 'populares' han hecho llegar a las otras dos formaciones, donde, en sanidad ofrecen hasta siete cambios, aunque ninguno de gran calado.

En concreto, el PP ofrece a PSOE y Ciudadanos una cartera común de servicios, reforzar el papel de Interterritorial, impulsar las tecnologías sanitarias, mejorar la coordinación sociosanitaria, mejorar las necesidades de los profesionales, incrementar la compra centralizada de medicamentos o fomentar la e-salud. Pero nada de las grandes reformas sanitarias que el PP ha llevado a cabo en los últimos cuatro años (y en solitario) y con las que ha encontrado el rechazo de la oposición: la universalidad de la sanidad, la derogación del copago o la modificación de la Ley de Dependencia.

Tal y como publica El País, a pesar de que Rajoy se muestra dispuesto a una negociación "sin límites", su documento deja fuera sus reformas clave y obvia los compromisos que los otros dos partidos alcanzaron para derogar algunas de sus 'leyes estrella'. En sanidad, por ejemplo, PSOE y Ciudadanos plantean la recuperación de la tarjeta sanitaria en os términos anteriores al Gobierno de Rajoy (incluyendo a los inmigrantes irregulares), acabar con el incremento del copago farmacéutico y las incompatibilidades introducidas en dependencia.

La no inclusión de estas importantes reformas (junto a otras relativas a educación, economía, fiscalidad o empleo) ha hecho que las dos formaciones se opongan, por ahora, a abrir negociaciones alrededor del documento programático del PP. De hecho, Pedro Sánchez ni siquiera se lo llevó a la reunión que mantuvo el martes con el líder del PP. Y Albert Rivera, por su parte, aún no lo ha estudiado con detalle, tal y como ha explicado su secretario de Comunicación, Fernando de Páramo. “No vamos a entrar en un Gobierno ni vamos a gobernar de la mano de Rajoy. Por tanto, poco sentido tiene pactar un programa de gobierno con ellos. Eso está descartado”.

PSOE y Ciudadanos coinciden en tres razonamientos para no apoyar la investidura de Rajoy, según El País. Por un lado, sus estrategas les advierten que es mejor no dar la impresión de negociar algo que no se está dispuesto a conceder. Les recuerdan, también, la displicencia con la que Rajoy trató en marzo el mismo documento con el que viene ahora en julio. Y, finalmente, que la oferta del PP hace referencia al vínculo que tienen los tres partidos (unidad de España, pacto antiterrorista, europeísmo y moderación en su afán reformista), pero obvia otras importantes medida de calado, como las sanitarias.