Matesanz se quiere despedir de la ONT por la puerta grande

Lo anunció en abril: “Creo que ha llegado el momento adecuado para dejar la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), porque ya tengo una edad. Voy a cumplir los 67 años y, en consecuencia, no me veo con fuerzas para una legislatura más al frente de la organización”. Y Rafael Matesanz cumplirá con su palabra una vez ya se ha conformado un Gobierno estable en España.

Pero eso sí, el todavía director y siempre fundador de la ONT se quiere despedir del sistema por todo lo alto. Pendiente de una reunión cara a cara con la nueva ministra de Sanidad, Dolors Monsterrat, Matesanz tiene en mente dejar la capitanía de la organización una vez se hagan públicos los resultados anuales de la ONT este año. Unos resultados que, según ha podido saber Redacción Médica, marcarán un antes y un después en la historia española de los trasplantes.

La fecha prevista es finales de enero o principios de febrero como tarde, momento para el cual Matesanz habrá tenido tiempo para dejar todo bien atado a su sucesor y podrá disfrutar de una despedida laureada por unos grandes resultados para el sistema español de trasplantes. Aunque la decisión debe consultarla con la ministra, sería extraño hacer casi coincidir la publicación de los resultados anuales con el relevo en la dirección.

Alguien 'de la casa' como sucesor

Sobre la sucesión, este diario ha podido confirmar que el director de la ONT tiene claro quién debe tomarle el relevo: alguien de dentro o de fuera de la organización, pero que sea un profesional sanitario; alguien 'de la casa', que sepa cuidar de la ‘joya de la corona’ del Sistema Nacional de Salud.

Después de que esta semana presidiera por última vez la XVI Reunión de la Red y Consejo Iberoamericano de Trasplantes en Costa Rica, Matesanz tiene en agenda verse con la ministra en los próximos días para anunciarle lo avanzado en este artículo y quizá también para darle a conocer un avance de los resultados anuales del sistema de trasplantes, que se espera superen ya los 40 donantes por millón de habitantes, cifra que se habían puesto como objetivo para 2020.