El virus de Marburgo ha puesto alerta a la sanidad de múltiples países. En España ya hay un posible caso de un contagiado con este virus, que es
muy similar en algunos aspectos con el del Ébola. Ambos pertenecen a la familia Filoviridae y
comparten características clínicas similares. Las tasas de letalidad de sus brotes pueden ser elevadas, según recoge la Organización Mundial de la Salud (OMS). A pesar de estos aspectos en común, hay diferencias que
Redacción Médica ha recogido en este análisis.
Síntomas comunes de los virus: fiebre y hemorragias
Los síntomas son uno de los puntos que pueden unir en un principio a ambos virus. Aquellos que comparten son:
la fiebre, el dolor de cabeza y el muscular, los fallos renales y síntomas gastrointestinales y hemorragias.
Pero hay otros que son específicos.
Con el virus de Marburgo, gran parte de las infecciones son asintomáticas o presentan escenarios leves. Además de los ya mencionados,
provoca malestar general, síntomas respiratorios, coagulación intravascular diseminada y vómitos de sangre. Las hemorragias en este caso suelen ser nasales en algunos pacientes.
El virus del Ébola, por su parte,
también conlleva dolor de garganta y tos, debilidad, hemorragias en la piel y otras zonas del organismo, sarpullidos y fracaso no solo en los riñones, sino también en el hígado.
El periodo de incubación, es decir, el periodo entre la infección y la aparición de los primeros síntomas, de ambos virus es el mismo, pues oscila entre dos y 21 días.
Mismos métodos de diagnóstico y transmisión de los virus
La transmisión es otro de los aspectos que tienen en común ambos virus, ya que la vía principal de contagio se produce a través de secreciones de pacientes que están enfermos, como puede ser sangre, mucosa, orina, sudor, etc). Esto también incluye superficies y materiales contaminados con dichos líquidos o secreciones.
Para establecer un diagnóstico clínico de estos virus hay que descartar otras enfermedades como la meningitis, la fiebre tifoidea o el paludismo. Los métodos que se utilizan en ambos casos son:
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Pruebas de inmunoadsprción enzimática
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Pruebas de detección de antígenos
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Prueba de seroneutralización
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PCR
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Microscopía electrónica
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Aislamiento del virus mediante cultivo celular
No existe un tratamiento eficaz para el virus del Ébola ni de Marburgo
Ni para el virus de Marburgo, ni para el del Ébola
existe un tratamiento fijado, en el primer caso no hay ninguno autorizado y en el segundo, ninguno de eficacia probada. Sin embargo,
existen terapias que pueden mejorar considerablemente la supervivencia, según sostiene la OMS: se trata de la terapia mediante rehidratación, administrada por vía oral o intravenosa, además del tratamiento de síntomas específicos.
En ambos casos no existe una vacuna aprobada para combatirlos. En el caso del virus de Marburgo, en 2020 la Agencia Europa de Medicamentos concedió una autorización de comercialización de las vacimas Zabdeno y Mvabea. Estas, aunque podrían proteger contra el virus, no se ha demostrado aun su eficacia en ensayos públicos.
En cuanto al ébola, existe una vacuna experimental, denominada rVSV-ZEBOV, que ha demostrado proporcionar una gran protección en un ensayo clínico a gran escala.
Cómo actuar frente al virus de Marburgo
La Comunidad Valenciana activó este viernes el protocolo ante un caso sospechoso de virus de Marburgo en un hombre de 34 años que estuvo en Guinea Ecuatorial durante un periodo de tiempo que podría corresponder con el periodo de incubación y que presenta síntomas compatibles con la enfermedad. Finalmente, el Ministerio ha descartado la presencia de este virus y también el del ébola.
Andalucía, por su parte, está elaborando instrucciones sobre los circuitos de actuación ante este virus, tras la aparición de este caso sospechoso. Las comunidades autónomas, junto al Ministerio de Sanidad, han consensuado un protocolo de actuación ante esta afección. La Junta de Andalucía ha remitido el protocolo a la Red de Vigilancia de la Dirección General de Salud Público y Ordenación Farmacéutica y al Servicio Andaluz de Salud (SAS).
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