Kristalina Georgieva, presidenta del FMI.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha
revisado a la alza el crecimiento de España para este año y el que viene. De manera concreta, su estimación de crecimiento es de 1,5 puntos para 2023 y 2 puntos para 2024. Esta previsión se traduce en "más recursos potencialmente destinables al sector salud", aseguran desde la Asociación Economía de la Salud (AES). Es interesante apuntar que, aunque la previsión para 2023 se ha mantenido, el FMI ha rebajado la previsión para 2024 en cuatro décimas.
Anna García-Altés, presidenta de AES, explica en Redacción Médica que, si se
cumple la previsión del FMI, "las cifras pueden tener un
impacto directo en el gasto público en salud". La presidenta comenta que un aumento de la producción de bienes y servicios va ligado a más ingresos para las empresas y trabajadores. Esto tiene como resultado mayor recaudación de impuestos y, por tanto, un impulso de la financiación de servicios públicos.
"Si el crecimiento económico se traduce en un aumento del consumo, también habría un aumento en la recaudación de impuestos sobre el consumo", asegura García-Altés, que recuerda que "esta
recaudación efectiva de impuestos la que permite al Gobierno financiar los servicios públicos, entre los que se encuentra el gasto público en salud". "Por lo tanto, a mayor crecimiento, más recursos potencialmente destinables al sector salud", enfatiza.
Futuro del gasto en salud más allá de la pandemia
Desde AES trabajan por ampliar la visión del futuro de la economía de la salud más allá del impacto que ha tenido la pandemia por Covid-19. Desde la asociación inciden en que es necesario
ver cómo ha cambiado este tiempo la utilización de servicios sanitarios y en el estado de salud, más allá de los propios de la pandemia. "El estado de alarma sirvió para flexibilizar y dar mayor eficacia a la clínica y a la gestión”. Pero ahora hay que avanzar y, como sugieren estos académicos, preguntarse si la gestión pública seguirá más preocupada por el control legal que por su eficiencia”, han comentado desde AES.
De esta manera, la asociación quiere
visibilizar cómo va a evolucionar el Sistema Nacional de Salud (SNS) durante las próximas décadas y poner sobre la mesa el debate de qué cambios "imprescindibles" se deberán adoptar de cara al futuro.
Gasto clave en la economía española
El gasto sanitario es un vehículo 'potente' para la economía española. Por ejemplo, un informe de Fedea de 2022 determinó que la sanidad es la prestación social que
más impacto positivo genera para paliar el riesgo de pobreza entre la población española. Según los datos que aportaba la investigación, los
servicios de salud equivalen al 28,9 por ciento de la renta que perciben los hogares con menos recursos, lo que los sitúa al frente de la clasificación.
Los expertos de Fedea estimaron que las
prestaciones en especie que realizan conjuntamente la sanidad y la educación repercuten en una reducción de la tasa de la pobreza de 6,7 puntos, pasando de un 21,1 por ciento de la población a un 14,4 por ciento.
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