La
retirada de la mascarilla obligatoria en los espacios interiores, o al menos en la gran mayoría de ellos, supone el
final simbólico de la pandemia del Covid-19 y un paso determinante hacia la recuperación de la normalidad perdida hace ya más de dos años. Sin embargo,
la normativa aprobada por el Gobierno genera dudas entre las comunidades autónomas, que han decidido presentar sus propias indicaciones ante la incertidumbre que ha generado esta iniciativa.
El viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19,
Antonio Zapatero, reconoce a
Redacción Médica que le hubiera gustado que el texto legal aprobado por Moncloa fuera "más descriptivo" y no tan
"escaso en cuanto a contenido". "El número de consultas que hemos recibido ha sido muy llamativo" debido a las dudas que ocasiona. "Es un texto que no llega a tres páginas y de las cuales casi dos son de introducción", sostiene. "Se dejan muchas medidas en el aire, especialmente en el ámbito laboral, en donde dependerán de los servicios de riesgos laborales en función de elementos como la distancia de seguridad o la ventilación", lo cual, a su juicio,
"genera dudas".
A pesar de ello, celebra que el Gobierno haya tomado esta medida y
espera que "suponga el inicio del fin de la pandemia". En este sentido, destaca las altas tasas de inmunidad entre la población gracias a la campaña de vacunación y, también, a los propios contagios, que generan protección frente al virus.
"La mayoría de los contagios son asintomáticos, pero debemos mantener la guardia y no cantar victoria". Es por eso que pide "prudencia" a los madrileños. A su vez, asegura que desde la Consejería de Sanidad se seguirá monitorizando la evolución epidemiológica con cautela.
Los retos que se abren en este nuevo escenario, según señala Zapatero, es la
reducción de las listas de espera, tanto quirúrgicas como de consulta y diagnósticas, así como seguir avanzando en la
digitalización de la sanidad. Un aspecto este último sobre el que ha dicho que no viene a sustituir la presencialidad, sino a complementar. “En ámbitos como el de la Atención Primaria, ha demostrado ser una buena herramienta para el seguimiento de pacientes crónicos”, ha dicho.
Eliminar la mascarilla "puede ser un problema"
Desde Andalucía también se ha mostrado ciertas dudas a la eliminación de la obligatoriedad de las mascarillas en el interior. Así, la viceconsejera de Salud y Familias,
Catalina García, ha recalcado a
Redacción Médica que "
el virus sigue existiendo y sigue estando aquí, además de que sigue contagiando", una realidad por la cual se ha llamado a la "prudencia" más con la cercanía de las fiestas de primavera en la región.
García reiteraba que
"quitar las mascarillas en interior que es precisamente donde más contagios puede haber puede ser un problema", presentando la alternativa de “una retirada paulatina” con recomendaciones para cada espacio.
Con la mirada puesta en el Real Decreto publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado, García ha expuesto que desde la comunidad se seguirá exigiendo el uso de la mascarilla, tal y como se expone en el texto legislativo "en centros sanitarios y sociosanitarios, en transportes públicos y
nosotros recomendaremos que en el interior pueda haber una valoración por parte de cada empresa". Una postura a la que suman la exigencia de las medidas sanitarias "donde no se pueda mantener distancia de seguridad", subrayando así aquellos espacios de "interior, donde
nosotros recomendaremos el uso de la mascarilla".
En este punto, una vez conocidas las medidas presentadas en el BOE, la Consejería de Educación andaluza junto a la Consejería de Salud han informado de
la obligatoriedad del uso de las mascarillas en el "transporte escolar", adaptándose así a la norma y buscando ampliar la seguridad de los más jóvenes. De igual forma, desde las universidades públicas de la región también se ha recomendado el uso de las mascarillas en "las instalaciones de uso compartido",
lo que supone la continuación de las medidas de seguridad en los espacios académicos.
Indicaciones de las CCAA ante la retirada de la mascarilla
En
Aragón, la consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha indicado que, más allá de las situaciones en las que por ley habrá que seguir llevándola, "todo el mundo sabe en qué espacios son necesarias, en aras de la sensatez". "
Tenemos las recomendaciones de aquellos espacios que sabemos que podemos influir en el índice de contagios porque se encuentran personas vulnerables", ha añadido la consejera. En este sentido, ha recordado que "en el ámbito escolar no son obligatorias", pero ha puesto de manifiesto que pueden mantenerlas por cautela o precaución "aquellos profesores que son vulnerables o tienen alumnos que son vulnerables".
El
Principado de Asturias, sin embargo, es más categórico y anuncia que
tomará "medidas específicas" ante el empeoramiento de la situación epidemiológica en la comunidad autónoma. El consejero de Salud, Pablo Fernández, ha explicado que "la recomendación de un uso responsable de la mascarilla que se hace en el decreto ley debe interpretarse en nuestras circunstancias como
seguir manteniendo su uso en espacios interiores, con la salvedad de los centros educativos".
Por eso, ha avanzado que
"vamos a hacer un llamamiento para que se siga utilizando la mascarilla en interiores" mientras Asturias permanezca en un nivel de riesgo alto por coronavirus. Ésta será "la medida más importante" de un paquete de medidas que también "guardan relación con las indicaciones para hacer pruebas diagnósticas, con las restricciones sociales y el aislamiento de casos positivos y con adelantar la segunda dosis de recuerdo de la vacuna a los mayores de 80 años".
En
Galicia, la Consellería de Sanidade ha recomendado
mantenerla en el interior de los centros educativos, mientras que el
gobierno navarro recomienda usar la mascarilla por la población vulnerable de manera general o por cualquier persona en los
eventos multitudinarios, en las aglomeraciones y en celebraciones familiares o privadas cuando asista alguna persona vulnerable.
Asimismo,
el Gobierno vasco reclama el "uso responsable" de la mascarilla a los trabajadores vascos mayores de 60 años mientras que la presidenta del gobierno riojano,
Concha Andreu, ha apelado a la "responsabilidad individual" y ha recomendado su uso
"en caso de no encontrarse bien" o porque no haya distancia suficiente entre las personas.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.