La tecnología médica es el único producto sanitario que baja precio

Las familias llevan varios meses consecutivos teniéndose que ‘rascar’ más el bolsillo por su consumo sanitario. EL IPC  de septiembre indica que volvieron a subir los precios de todos los productos y servicios de salud, excepto en el caso de la tecnología terapéutica.
 
El precio de los aparatos y equipos terapéuticos se redujo un 0,2 por ciento respecto a septiembre de 2016. En cambio, los costes de los fármacos y otros productos médicos se incrementaron un 0,4 y un 1,1 por ciento, respectivamente.
 
Algo parecido ocurrió con los servicios sanitarios. El precio de los servicios médicos aumentó un 0,5 por ciento, el de los hospitalarios un 0,6 por ciento, el de los dentales un 1 por ciento y el de los paramédicos un 1,4 por ciento.
 
Sin embargo, el crecimiento más llamativo ha sido el de los seguros relacionados con la salud. El coste de este tipo de aseguramiento ha aumentado un 4,6 por ciento respecto a 2016 a lo largo de todo el año.
 
Crecimientos autonómicos
 
En general, los precios de productos del ámbito de la salud aumentaron un 0,8 por ciento en septiembre respecto al mismo periodo de 2016, un incremento que está por debajo del de la media española (que subió un 1,8 por ciento).
 
Cataluña y Comunidad Valenciana son las autonomías que han dirigido el incremento de los precios en el ámbito de la salud, con incrementos del 1,5 por ciento y del 1,3 por ciento.  Mientras, la Región de Murcia lidera las reducciones de costes en este campo, con un -1,1 por ciento.