La crisis devalúa la mano de obra sanitaria más que ninguna otra profesión

El trabajo de los profesionales sanitarios es el más devaluado desde que comenzó la crisis en 2008. Así lo refleja el Índice de Precios del Trabajo (IPT) que por primera vez ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE) en base al periodo 2008-2014. En estos años, mientras la media de todas las profesiones habla de una pérdida del 0,7 por ciento, el precio de la mano de obra en actividades sanitarias ha caído un 5,3 por ciento. 

Este indicador pretende medir la evolución temporal del precio de la mano de obra sin que ésta esté afectada por los cambios en la calidad y cantidad del factor trabajo. De esta forma, señalan desde el INE que "se descuenta el efecto composición, que se debe, entre otros factores, tanto a los cambios en el número de horas trabajadas, en el tipo de contrato, en las características de los trabajadores, como a los deslizamientos por antigüedad y promociones de los trabajadores". Se trata, en resumen, de medir la variación del coste salarial pagado por los empleadores por el conjunto de puestos de trabajo existentes, suponiendo que se mantiene la misma composición de puestos de trabajo del año anterior. 

En negativo desde 2010

En este sentido, las actividades sanitarias se llevan la medalla de oro en cuanto a caída en el precio de su mano de obra. Pese al ligero aumento del 0,2 por ciento experimentado en 2014 respecto al año anterior, desde 2010 los porcentajes han sido negativos, llegando al 4,9 por ciento de caída sufrido en 2012 respecto a 2011. 

Respecto al total de actividades, la media se sitúa en 2014 en una subida del 0,8 por ciento, con aumentos en hostelería o industrias extractivas del 6,9 y 5,8 por ciento respectivamente, lejos del modesto 0,2 por ciento sanitario en ese año. 

Además, el IPT refleja cómo en el periodo 2008-2014, el precio de la mano de obra en los contratos temporales cayó un 1,2 por ciento, mientras que aumentó un 3 por ciento en los contratos indefinidos.