Horario y descanso flexibles al adaptar puestos a sanitarios con longcovid

Limitar el horario, realizar el trabajo a domicilio o aumentar el tiempo de descanso. Estas son las principales adaptaciones que aconsejan los expertos en salud laboral para poder ajustar el puesto de trabajo de los profesionales sanitarios que padecen covid persistente. Ante el último informe de 'Procedimiento de actuación para los servicios de prevención de riesgos laborales frente a la exposición al SARS-CoV-2', publicado por el Ministerio de Sanidad, el secretario de Salud Laboral de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts) de Atención Primaria, Pelayo Pedrero, explica a Redacción Médica que "existe la obligación legal de adaptar el puesto de trabajo a cada trabajador, y los facultativos que padezcan covid persistente, pueden exigir dicha adaptación".

El documento estipula que "los trabajadores y trabajadoras que hayan sido diagnosticados de condición post Covid-19 una vez reincorporados a su puesto de trabajo, deben ser valorados por el personal sanitario del servicio de prevención para determinar si requiere o no adaptaciones en su puesto de trabajo en función de sus limitaciones". Respecto a esto, Pedrero añade que "hay que valorar que el trabajador pueda realizar su labor en su puesto de trabajo sin que esta patología le afecte demasiado y, si se observa que no puede realizarlo, se debe limitar el horario o aumentar los descansos". Además, Pedrero asegura que, en caso de que el profesional tenga problemas de fatiga o problemas cardíacos, se tendrá que limitar sus funciones y que, por ejemplo, las pueda realizar a domicilio".

Por su parte, Yolanda Cabrero, delegada de Prevención de Riesgos Laborales del Hospital de Getafe, sigue la misma visión que el secretario de Salud Laboral y afirma a este medio que "cada puesto de trabajo tiene que tener una evaluación específica e independiente y, si es necesario, que la jornada no sea más larga que el tiempo que se estipule".

Pese a ello, Cabrero considera que, aunque depende del servicio local en el que se encuentre, en general, "los servicios de prevención de riesgos laborales son muy reacios a esta adaptación, comenzando por el reconocimiento de que el trabajador sufre covid persistente. La evaluación que hacen es absolutamente estándar (toman la tensión, peso, talla, agudeza visual, etc) pero en ningún momento la exploración está enfocada a esta patología".

Secuelas físicas y mentales de los sanitarios tras el covid

Tomás Cobo, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), advierte a Redacción Médica de los escasos pasos que se han dado en este sentido hasta la fecha. Además, subraya que además de las consecuencias físicas de haber pasado el Covid-19, se debería abordar cómo ha afectado la pandemia a la salud mental de los profesionales sanitarios que han estado en primera línea. Según los datos de los que dispone la organización, el 50 por ciento de los médicos tiene signos de burnout y el 33 por ciento, si pudiera, se jubilaría". "Eso es un problema grave y un problema poscovid total", manifiesta el líder de los médicos españoles. 

Teniendo en cuenta que "España cuenta con un Sistema Nacional de Salud (SNS) divergente", Cobo también cree que dicha adaptación que Sanidad plasma en el documento debería ser "individualizada". Esto es, cada una de las CCAA y los Servicios "debería buscar la máxima eficiencia y capacidades dentro de la patología poscovid que los sanitarios tengan, atendiendo a la parte mental y a la infecciosa". En este sentido, advierte que también habría que tener en cuenta en el Servicio asistencial en el que trabaje el sanitario con covid persistente, ya que "no es lo mismo un médico de Primaria que un anestesista que un radiólogo". 

Circuito especializado para los sanitarios con covid persistente

Una situación que para Carolina Pérez de la Campa, delegada de Prevención de Riesgos Laborales de Amyts de Atención Primaria, se podría solucionar empezando por la creación de "un circuito especializado para todos los profesionales sanitarios que padezcan covid persistente". Esto es necesario ya que, según Pérez de la Campa, "el seguimiento que tienen los profesionales de la salud a nivel de atención covid persistente no es diferente al de cualquier otro ciudadano". 

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Carolina Pérez: "Si el profesional no tiene capacidad para realizar su trabajo, se intenta adaptar"

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Pérez de la Campa asegura que "esto no solo ocurre en covid persistente, sino en otras muchas enfermedades crónicas". Desde su experiencia, "se han llevado a cabo muchas adaptaciones laborales debido a otras patologías crónicas determinadas por el médico de salud laboral y, si el profesional no tiene capacidad para realizar su trabajo, se intenta adaptar o, a pesar de que no es lo más habitual, puede recibir un 'no apto'".

Valoración específica del trabajador con covid persistente

El hecho de que el SARS-CoV-2 sea considerado una enfermedad profesional abre la puerta a los sanitarios a poder adaptar a su puesto de trabajo, dependiendo de las secuelas que genere el covid persistente. A este respecto, Pedrero subraya que "el covid persistente es un síndrome que tiene mucha sintomatología con limitaciones diversas: fatiga, debilidad muscular, afectación cardiaca, etc.". Por ello, para Pedrero también es primordial "hacer una valoración específica del trabajador y adaptar su puesto de trabajo".

Pese a que el Ministerio ha abierto la puerta a adaptar los puestos de trabajo a personas diagnosticadas de “condición post Covid-19”, existe una distorsión legal que lastra la posibilidad de lograr adecuar un puesto de trabajo por longcovid en el Sistema Nacional de Salud (SNS).

El presidente del Bufete De Lorenzo Abogados, Ricado De Lorenzo, afirma que el documento "lamentablemente consagra un criterio, el 4/2021 que el Instituto Nacional de la Seguridad Social a través de la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social viene aplicando, distorsionando el contenido del Real Decreto Ley 3/2021, en el que el asunto de la contingencia determinante de los contagios por Covid-19 a profesionales sanitarios y sociosanitarios se considera como enfermedad profesional, bajo presunción de haber contraído la infección en su desempeño profesional".