Antonio Matador, secretario general del Sindicato Médico del Principado. |
María Márquez. Madrid
El Sindicato Médico del Principado de Asturias (Simpa) baraja abandonar la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ante su desacuerdo con el pacto establecido por el Foro de la Profesión Médica y el Ministerio de Sanidad. Para asegurar que esto no se produzca, la secretaría general, liderada por Francisco Miralles, ha convocado una ejecutiva en la última quincena de este mes (18 ó 25 de septiembre) y confía en que “no se tomen decisiones precipitadas”. Antonio Matador, secretario general del Simpa, confiesa que “personalmente” preferiría no abandonar la Confederación pero no adelanta acontecimientos hasta el próximo día 10, cuando se reúna la ejecutiva autonómica. Ambas partes admiten que el diálogo se ha intensificado en los últimos días.
No es el primer distanciamiento “con Madrid”
La decisión de los médicos asturianos no será fácil. Se trata de un sindicato muy vinculado a la ‘central’, de la que fue cofundador. Esas “raíces profundísimas” son las que llevan a Matador a lamentar una posible escisión, pero al mismo tiempo admite que este desapego con “Madrid” se inició hace más de diez años, cuando CESM firmó el Estatuto Marco, con el que no comulgaba el Simpa ya que “hizo desaparecer que el descanso de la guardia computase como jornada”. Quizás esto pese en la reunión del día 10 de septiembre, cuando se pronuncien sobre la conveniencia de continuar bajo el amparo de la Confederación.
Con respecto al convenio firmado con Sanidad, además de “la precipitación” por la firma y la inquietud que les ha provocado lo relativo al cambio de régimen jurídico, el Simpa pone en duda la legalidad de negociar esas cuestiones fuera “de los cauces de negociación (Mesas…etc) que establece la ley”.
Por su parte, Miralles insta al sindicato asturiano “a no tomar decisiones precipitadas”, seguir analizando el convenio “en un debate interno de la casa”, y recalca el gran valor que aporta la organización autonómica a la estatal. Recuerda además que el ‘ok’ final al documento se dio “por una postura mayoritaria”, algo con lo que tampoco está de acuerdo Antonio Matador, quien opina que “para firmar algo de ese calibre, debiera necesitarse una mayoría más importante, no un empate técnico”.