La ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Los nuevos datos sobre los balances fiscales de todas las comunidades autónomas han revelado que la
inversión estatal dirigida a la investigación biomédica tiene actualmente dos velocidades en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Solo entre
Madrid y Cataluña concentran cerca del 60 por ciento de las transferencias económicas dirigidas a impulsar este tipo de proyectos. Mientras que el resto de regiones se reparten de una manera algo más equilibrada el 40 por ciento restante de la tarta. Los resultados confirman a las dos grandes urbes españolas como los principales
polos de atracción de financiación en este sector científico.
Las cifras se han dado a conocer como parte de los tres informes que el
Ministerio de Hacienda ha hecho públicos para transparentar
las partidas del actual modelo de financiación autonómica. Aunque los documentos adolecen de falta de detalle en varios campos, sí que viene recogida una inversión total de más de
2,9 millones de euros para sufragar los costes del
Consorcio Centro de Investigación Biomédica en Red, que se reparten entre las comunidades que participan en los proyectos.
Destaca especialmente la situación de
Cataluña que en el año 2021 (último del que se tienen datos) recibió un total de
994.600 euros en este campo, lo que representa casi una tercera parte de todo el fondo estatal. Le sigue de cerca la
Comunidad de Madrid con un presupuesto que se elevó hasta los 754.800 euros. Mientras que en un tercer escalón aparece
Andalucía que, pese a su importante peso poblacional, se ha quedado en los 275.000 euros.
Más allá de los tres grandes atractores de financiación, también destaca la C
omunidad Valenciana que consiguió 171.000 euros,
Navarra que se hizo con 141.800 euros,
Extremadura que logró 107.700 euros o
Castilla y León con 109.100 euros.
Aragón (102.000 euros),
Castilla-La Mancha (96.400 euros) o
País Vasco (65.900 euros) también conforman este grupo intermedio en la clasificación económica.
En el otro lado de la balanza, se encuentran las regiones cuyas transferencias para biomedicina han sido mucho más testimoniales. Es el caso de
Cantabria (34.900 euros),
Asturias (32.200 euros),
Murcia (30.500 euros),
Baleares (29.300 euros),
Galicia (25.400 euros) y
Canarias (22.000 euros). Mientras que la inversión se queda a cero en
La Rioja, aunque actualmente es
la única comunidad autónoma donde todavía no se cursa Medicina. Tampoco han contado con fondos estatales las ciudades de Ceuta y Melilla.
El gasto en farmacia de las mutuas
Otra de las inversiones que han salido a la luz con la publicación de las balanzas fiscales son los gastos derivados de la labor de las
mutuas colaboradoras de la Seguridad Social en cada una de las comunidades autónomas. En concreto, Hacienda ha revelado que en el año 2021 se inyectaron más de
34,9 millones de euros para cubrir los gastos destinados a farmacia en estas entidades y que se repartieron en todo el conjunto del territorio nacional.
En este caso, el reparto sí que sigue un patrón que encaja con el actual reparto poblacional del mapa español. De esta manera,
Andalucía ha sido la que se ha llevado una mayor aportación con más de 6,1 millones de euros. Mientras que los mayores repartos de transferencias los completan
Cataluña (4,9 millones),
Madrid (4,4 millones) y
Comunidad Valenciana (4,3 millones), las zonas con mayor volumen de habitantes.
La contribución a la prestación farmacéutica de las mutuas también ha tenido un impacto presupuestario en
Galicia (2,4 millones),
Castilla y León (1,8 millones),
País Vasco (1.6 millones),
Castilla-La Mancha (1,6 millones),
Canarias (1,5 millones) o
Aragón (1,5 millones).
Mientras que la tabla la completan las regiones con una población más reducida. Es el caso de
Murcia (947.100 euros),
Asturias (816.900 euros),
Extremadura (709.700 euros),
Navarra (616.000 euros),
Baleares (526.500 euros),
La Rioja (337.000 euros) y
Cantabria (295.900 euros).
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