Carolina Darias, ministra de Sanidad; e Isabel Celaá, ministra de Educación.
EL Gobierno de España va a plantear esta tarde a las comunidades autónomas en el seno del
Consejo Interterritorial las medidas de prevención de
contagios Covid-19 para el
curso escolar 2021/2022. Lo hará a través de un
documento al que ha tenido acceso Redacción Médica, y que contempla la planificación en diversas medidas.
Entre ellas se establece la obligación de llevar
mascarilla en todo el alumnado a partir de los 6 años, así como el profesorado. Además se plantea un
doble escenario en función del nivel de transmisión de Covid-19:
el de nueva normalidad y nivel de alerta 1 y 2; y los de nivel del alerta 3 y 4.
Tanto en uno como en otro, los alumnos de
hasta cuarto de Primaria estarán en grupos de convivencia estable. A partir de ahí, la situación cambiará en función de la transmisión. Si es baja, la distancia interpersonal en el resto de niveles educativos será de 1,5 metros
pudiéndose flexibilizar hasta los 1,2 metros. Sin embargo, si la situación epidemiológica empeora, la distancia deberá ser únicamente de 1,5 metros, planteándose las clases al aire libre o, de forma excepcional, la semipresencialidad.
De hecho, la intención del Gobierno es
garantizar “la presencialidad para todos los niveles y etapas del sistema educativo al menos en nueva normalidad y nivel de alerta 1 y 2. De manera excepcional, se podrá pasar a semipresencialidad para los niveles de alerta 3 y 4 y sólo a partir de 3º de la ESO”. Del mismo modo,
Sanidad plantea que se hagan al aire libre todas las actividades posibles y que se multiplique el esfuerzo por ventilar al máximo los espacios educativos.
Sanidad explica en el documento, de cara justificar las medidas planteadas, que
“los menores de 10 años parecen tener menor capacidad de transmisión, mientras que los adolescentes transmiten como las personas adultas”. También señala que “con distancias inferiores a 1 metro aumenta mucho la transmisión del SARS-CoV2. El riesgo de transmisión disminuye según aumenta la distancia, en especial a partir de los 2 metros. La experiencia en el curso 2020-2021 nos dice que con 1,5 metros es suficiente para minimizar el riesgo, manteniendo los centros educativos abiertos y seguros en cualquier nivel de transmisión”.
Variantes Covid: posible escape de inmunidad
“Por ello, para poder flexibilizar la distancia por debajo de los 1,5 metros del curso 2020- 2021,
ha sido necesario establecer dos escenarios, ya que, si la transmisión comunitaria es baja, es seguro flexibilizar la distancia para todos los grupos de edad, pero si la transmisión comunitaria es alta, es necesario en la edad adolescente mantener la distancia de 1,5 metros, que se sabe efectiva para cualquier nivel de transmisión tras la experiencia del curso 2020-2021 en España. En cualquier caso, es importante recordar a la comunidad educativa la importancia del adecuado seguimiento de las medidas en todos los escenarios”, matiza Sanidad en el mencionado documento remitido a las comunidades autónomas.
En todo el documento, Sanidad manifiesta la necesidad de prevención frente a la enfermedad, a pesar de que “se estima que un alto porcentaje de la población sea vacunado a lo largo del 2021”. “Según la evidencia disponible,
podemos afirmar que la eficacia de las vacunas aprobadas en la actualidad es alta y, por tanto, el riesgo de enfermar tras la exposición al virus es muy bajo. Sin embargo,
no se puede descartar la posibilidad de infección y que las personas vacunadas, aunque no desarrollen síntomas, puedan transmitir la infección a otros individuos”, explica el Ministerio. Y es que el Ministerio tampoco descarta la incidencia del "contexto de la circulación de variantes de mayor impacto para la salud pública con
posible escape a la inmunidad".
Para la gestión de los casos, se pide que nadie con sintomatología compatible con el Covid-19 acuda a los centros educativos. Asimismo, “ante una persona que comienza a desarrollar síntomas compatibles con Covid-19 en el centro educativo, se seguirá un
protocolo de actuación previsto previamente. Se le llevará a un espacio separado de uso individual y se le colocará una mascarilla quirúrgica. La persona que lo atiende debe ponerse mascarilla FFP2 sin válvula. Si la persona es adulta, autónoma y se encuentra bien, se irá a su domicilio evitando contactos en el trayecto”.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.