Valentín Fuster y María A. Blasco, directores del CNIC y CNIO respectivamente.
El ejercicio de
2016 fue de ajuste para las dos funciones del
Instituto de Salud Carlos III. Tanto el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (
CNIC) como el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (
CNIO) han publicado sus respectivas
auditorías de cuentas en el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde
se reflejan disminuciones en la mayoría de partidas de ambas.
Respecto al CNIC, la memoria contable señala una
disminución de su patrimonio neto de 6 millones de euros respecto a 2015, al igual que un amplio descenso de las subvenciones, legados y donaciones. En concreto, estas pasaron de ser de 22.017.536 euros en 2015 a 18.166.341 el año pasado.
Según expone
la fundación en su memoria respecto a la captación de recursos, entre los años 2008 y 2016 ha obtenido más de
50,4 millones de euros procedentes de fondos competitivos nacionales, siendo la mayoría de origen público.
En 2016 también
se ha reducido la deuda pendiente del CNIC, tanto la de largo plazo como la de corto. La primera ha pasado de 23.489.350 euros en 2015 a 20.032.568 el pasado año, mientras que la segunda se redujo en 1.338.353 euros en 2016 hasta los 26.829.823 euros pendientes.
El CNIO ha reducido sus deudas pendientes con la administración por segundo año consecutivo
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Sí se ha registrado un ligero aumento en la
partida de gastos de personal, pese a una menor cifra de personal contratado, puesto que la plantilla profesional del CNIC pasó de 442 personas en 2015 a 431 en 2016. En este sentido, el CNIC recuerda que sólo en 2016 sus investigadores han participado en más de 90 convocatorias nacionales, "siendo exitosos en 44 propuestas, de las cuales 39 proceden de fondos nacionales públicos, incluida la prestigiosa
acreditación como "Centro Severo Ochoa" concedido entre los años 2016 y 2019".
En la línea general de descensos también se sitúan los ingresos por actividad propia -31.225.579 euros en 2016, casi 700.000 menos- aunque las
partidas de pago a proveedores registraron aumentos. En concreto, los pagos realizados pasaron de 18.884.571 euros en 2015 a 19.325,984 en 2016, mientras que los pagos pendientes lo hicieron de 1.642.927 a 3.248.588 el año pasado.
La memoria económica también recoge que la desviación entre el plan de actuación y los datos realizados procede del capítulo de ingresos, cuya desviación viene dada "principalmente por la no ejecución de subvenciones en la misma cuantía que no se han ejecutado los gastos previstos.
Como consecuencia de la política de contención con vistas a asegurar el futuro encaje de las necesidades del CNIC, el
gasto en general de la fundación se ha reducido respecto a lo previsto. Así ocurre principalmente en los aprovisionamientos y servicios exteriores", concluye el documento que publica el BOE.
Ajustes también en el CNIO
Similar situación
han vivido las cuentas del CNIO en 2016, con disminuciones en el total de patrimonio, de salarios y algunas partidas de subvenciones, donaciones y legados.
Del mismo modo, la
fundación ha reducido en 2016 sus deudas a pagar, pasando de ser de 28.856.410 euros en 2015 a 24.105.550 euros el año pasado.
Pese a que ha habido un
ligero aumento de personal de 12 personas en 2016 hasta dejar la plantilla en 428 profesionales, los gastos de personal han caído desde los 16.841.470 euros de 2015 a los 16.823.863 euros del año pasado. En esa línea, también los
sueldos y salarios se han reducido 244.72 euros hasta quedarse en 12.870.681 en 2016.
Por último, los
pagos a provedores han tenido comportamiento desigual, puesto que mientras que los pagos realizados han pasado de 18.183.439 euros en 2015 a 21.422.630 en 2016, los pagos pendientes han disminuido desde los 2.265.541 euros a los 1.647.533 euros el año pasado.
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