Antígenos, cardioprotección y pasión: la Semana Santa del médico cofrade

La Semana Santa vuelve este año a llenar de procesiones, cofrades y turistas las calles de las ciudades españolas. Desde Andalucía, las hermandades llevan meses trabajando para aplicar los protocolos y asegurar el correcto desarrollo de las medidas sanitarias durante las estaciones de penitencia.

Así, desde Sevilla, Pablo Bueno, director de la Unidad Clínica de Cantillana, junto a un equipo de médicos cofrades ha llevado a cabo un proyecto para delimitar la incidencia del coronavirus entre los costaleros. Se trata del proyecto 'Estudio trabajadera' que durante varios meses vienen analizando la incidencia del Covid-19 entre las cuadrillas que cargan los pasos de Semana Santa.

Los primeros resultados, que se han hecho públicos este mes de abril, señalan que de los 72 costaleros analizados tan solo 3 se contagiaron por Covid-19. Unos contagios que se produjeron durante la sexta ola de la pandemia y que no tuvieron relación con las pruebas.

De este modo, como recalca Bueno “los contagios no se dieron mientras estaban realizando los ensayos, sino que se produjeron en otro momento. Con este estudio queríamos mostrar si el hecho de usar mascarillas o la ventilación debajo de los pasos podría influir en un mayor número de contagios, y hemos visto que no es así”. 

Cabe destacar que, tal y como subraya Bueno, “todos los participantes estaban vacunados con su pauta completa y además se sometieron a un test antes de las pruebas”. Un protocolo que se repetirá durante los días de Semana Santa.

Médicos y cofrades

Además de los equipos sanitarios que establecen las autoridades regionales, las hermandades de sacramentales cuentan con sus propios equipos médicos. Así, en el caso de Pablo Bueno actúa como médico durante la estación de penitencia de la Hermandad de la Lanzada, que procesiona el Miércoles Santo.

El llamamiento de “cofrades a la calle” no deja de lado la seguridad sanitaria. Así, tal y como expone Bueno “la recomendación principal es tener sentido común. Debemos disfrutar de la Semana Santa, no se puede seguir con una situación que genera tanto estrés y frustración social, teniendo en cuenta que el virus sigue entre nosotros y respetando a los demás se puede volver a las calles”.

Además de la pandemia, los sanitarios que forman parte de las hermandades también dan apoyo en otras cuestiones como pueden ser lesiones y la propia prevención. “En mi caso voy con otros sanitarios que también son hermanos acompañando a la cofradía como médico. Como medida de control ante el Covid-19 tomamos la temperatura y analizamos a cada costalero, haciendo un test rápido en el caso de que presenten síntomas”, destaca el sanitario-cofrade.

Este control se suma a las instrucciones que se han dado desde las Consejerías de Salud. Así, en el caos andaluz, el protocolo recomendado por la Junta de Andalucía establece la recomendación general del uso de las mascarillas, el mantenimiento de la distancia interpersonal y no acudir a las procesiones si se tienen síntomas compatibles con el Covid-19.

Hermandades cardioprotegidas

Debido al alto número de personas que se reúnen durante las procesiones de Semana Santa, en Sevilla las hermandades cuentan con equipos de cardioprotección.

Así, desde el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa se ha hecho entrega de todo el material sanitario necesario a los hermanos mayores de la Estrella, San Gonzalo, La O, así como a miembros de la Junta de Gobierno de la Esperanza de Triana para realizar una asistencia ‘in situ’ durante sus estaciones de penitencia por las calles de la ciudad.

En palabras de la coordinadora de Urgencias del Hospital Quisónsalud Infanta Luisa, Auxiliadora Caballero, “se trata de un material que permite asistir ante una urgencia cardiaca a los médicos que forman parte de las hermandades. No solo se trata del propio desfibrilador, desde hace meses damos cursos y talleres para formar a los sanitarios y a los hermanos en reanimación cardiorespiratoria, con vistas a tener una Semana sAnta asegurada de la que se pueda disfrutar plenamente”.

Es por ello que, como recalca Caballero, las mochilas sanitarias donadas por el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa suma así a los equipos de reanimación “diferentes materiales sanitarios para atender pequeñas urgencias, como curas y analgésicos, tanto para las propias cofradías como para el público en general”.