Redacción. Madrid
La empresa BBK ha colaborado junto con la Fundación Síndrome de Dravet, en la creación de un programa cuyo objetivo es controlar a las personas con ataques epilépticos, sin necesidad de realizar turnos de vigilia nocturna.
Xabier Sagredo, presidente de BBK.
|
El detector de convulsiones nocturno que ha creado el centro de innovación EIC BBK, es un dispositivo domiciliario formado por sensores y alertas, basado en la tecnología de Microsof Kinect 2.0, que permite detectar de forma inmediata el inicio de una crisis epiléptica.
Ana Isabel Zorrilla Alonso, jefa de proyectos de EIC BBK, ha explicado que “la idea es desarrollar una solución de dispositivos multisensores que recojan movimientos, sonidos y parámetros del paciente con epilepsia mientras duerme y alerte a los cuidadores de que el paciente está convulsionando o está a punto de convulsionar”.
Por su parte, Luis Miguel Aras, director ejecutivo de la Fundación Síndrome de Dravet y director ejecutivo de EIC BBK, ha señalado que “la posibilidad de atenderles en el mismo momento en que aparece la convulsión reduce la duración e intensidad de esta crisis, permite proporcionar los fármacos adecuados a tiempo y reduce la tasa de mortalidad”.
Además, ha destacado “facilita el descanso de los familiares que vigilan, mejorando notablemente su calidad de vida”.
Otro proyecto que también ha puesto en marcha EIC BBK junto con Tecnalia es el desarrollo de un sistema más avanzado para prever la muerte súbita en personas epilépticas.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.