Edurne Arteche, jefa del Servicio de Radiología del Hospital Araba de Vitoria Gasteiz.
El
primer MIR que ha escogido este año 2024 la especialidad de
Radiología ha roto con la tradición de adiestrarse en un centro grande, como es
habitual entre los residentes que tienen mejor nota, optando por el
hospital Araba de Vitoria Gasteiz. Este hecho ha sorprendido a la jefa del
Servicio de Radiología del centro vasco y miembro de la Sociedad Española de Radiología Médica (
SERAM),
Edurne Arteche, afirmando que “este hospital no ha sido escogido por números tan bajos del MIR, como es en este caso el 90. El MIR se encontrará con un
Servicio pequeño pero acogedor que le permitirá, si tiene iniciativa, hacer lo que quiera al tener todos los campos abiertos y una gran sintonía con el resto de Servicios”.
La ilusión es el estado en el que se encuentra el Servicio de Radiología, a la expectativa de conocer al residente que, dentro de poco, se convertirá en un
miembro más del hospital. “En el Servicio se ha generado bastante expectativa con la llegada de una persona que ha sacado estas
notas en el MIR y es ilusionante que tenga interés por la especialidad”.
El protagonismo que adquieren los residentes en el Servicio es uno de los puntos que destaca Arteche en
Redacción Médica, explicando que, además, “se facilita las
rotaciones entre Servicios más grandes o en áreas que son más deficitarias o que en nuestro hospital no se pueden facilitar”.
"En caso de que les guste la residencia en el hospital, tienen trabajo asegurado cuando acaben toda la formación"
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La radióloga destaca que, a nivel de
investigación, el hospital cuenta con un gran aliado, como es el departamento de investigación
Bio Araba, “que está asociado al centro. Allí se podrá investigar y hacer todos los estudios que los radiólogos quieran, además de colaborar con proyectos unidos a la
Universidad de Vitoria-Gasteiz”. Actualmente, la especialista explica que “hay varios proyectos que están abiertos debido a que la especialidad de Radiología es muy demandada, casi todos los trabajos necesitan estudios de imagen”. Arteche relata que dentro del propio Servicio se encuentran “especialistas que son
profesores en la carrera de Medicina”. Una cosa que deja clara la jefa de Servicio es que “en caso de que les guste la residencia en el hospital, tienen trabajo asegurado cuando acaben toda la formación”.
El principal valor añadido del Servicio: El protagonismo del MIR
El cupo de Servicio de Radiología es de
dos residentes por año, menos la R3 que se pasa a uno. El primer residente que llegará al hospital “recibirá todas las facilidades y a ver si luego se queda”. Pese a esta ilusión, la especialista es consciente que
la situación de los hospitales pequeños es que “los residentes solamente se quedan si tienen algún
vínculo familiar o establecen aquí su vivienda. Si no es así, muchos se van porque hay gente que se forman en Bilbao y se vuelven a casa, debido a que la familia tira”.
"Los residentes solamente se quedan si tienen algún vínculo familiar o establecen aquí su vivienda"
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Todos los hospitales cuentan con aspectos positivos, y la radióloga destaca que el
principal valor añadido de Vitoria Gasteiz es el
protagonismo que llegan a tener los residentes: “El trato con todas las especialidades es muy cercano, a diferencia de los grandes, por lo que si el residente quiere podrá ir a quirófano, aprender técnicas intervencionistas, colaborar con otros Servicios, etc.”.
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