Tim Silk.
Los
distintos patrones cerebrales pueden ayudar a explicar las
variaciones en la forma en que los niños se presentan con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (
TDAH), allanando el camino hacia un
mejor tratamiento y
apoyo para el trastorno del desarrollo neurológico común.
Mediante el uso de
técnicas de neuroimagen,
The Children's Attention Project, dirigido en el Murdoch Children's Research Institute (
MCRI), descubrió que ciertos patrones en todo el cerebro parecen estar relacionados con los síntomas, el desarrollo y la cognición del trastorno.
Los hallazgos,
publicados en línea en el
American Journal of Psychiatry, sugieren que las diferentes formas en que se presenta el TDAH en los niños pueden provenir de una combinación de factores que tienen bases biológicas específicas en el cerebro.
El investigador principal,
Tim Silk, de la Escuela de Psicología de la Universidad de Deakin, ha explicado que para
mejorar los tratamientos o
predecir la posible progresión del TDAH es importante comprender qué sucede en el cerebro. "Aún no sabemos cuáles son los mecanismos subyacentes en el TDAH, pero está bastante claro que no está aislado en una o dos áreas del cerebro", asegura Silk.
Ningún marcador biológico puede detectar el TDAH, sino que, actualmente, son las evaluaciones realizadas por un médico o psicólogo las que forman la base del diagnóstico formal. El trastorno se trata con estrategias de comportamiento, asesoramiento y medicación, según sea necesario.
Cuatro patrones diferentes
El estudio combinó múltiples imágenes de resonancia magnética para examinar los
cerebros de 160 niños australianos de
entre 9 y 12 años,
70 de los cuales cumplieron con los
criterios de diagnóstico para el TDAH. Una vez que identificaron un conjunto de patrones cerebrales, los investigadores demostraron que esos patrones podían predecir los síntomas del TDAH en un grupo independiente de niños.
Los expertos encontraron dos patrones cerebrales particularmente relevantes para el TDAH
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Los investigadores identificaron
cuatro patrones diferentes en todo el cerebro, cada uno asociado con perfiles únicos. Estos abarcaban las características demográficas, como el sexo y el estado socioeconómico; las variables de la vida temprana, como el peso al nacer y el tabaquismo en el embarazo; los factores cognitivos como el pensamiento, el lenguaje y las habilidades académicas; y los factores relacionados con el TDAH, como los síntomas típicos, el uso de medicamentos y las dificultades sociales y calidad de vida.
Los expertos encontraron
dos patrones cerebrales particularmente relevantes para el TDAH. En uno, los niños con cerebros menos maduros en el desarrollo mostraron más síntomas de hiperactividad y tenían más probabilidades de recibir tratamiento El otro patrón reflejó las
características clínicas típicas del TDAH, como síntomas de hiperactividad, problemas sociales e irritabilidad, puntajes académicos y cognitivos más bajos y uso de medicamentos para el TDAH.
Avances en los análisis de resonancia magnética
"Las diferencias en la estructura general del cerebro pueden dar lugar a cambios funcionales en las redes cerebrales que son responsables de la función cognitiva, los procesos sensoriales y motores", ha añadido Silk, quien también es
miembro honorario de MCRI y miembro honorario senior del Departamento de Pediatría de la Universidad de Melbourne.
"Los avances recientes en los
análisis de resonancia magnética nos permiten examinar mejor estas variaciones a través de los tipos de tejido y los individuos".
El objetivo final a largo plazo de la investigación, ha explicado, es ver si la neuroimagen podía proporcionar medidas objetivas para el
diagnóstico de TDAH y
tratamientos personalizados.
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