Redacción.Madrid
HM Universitario Sanchinarro ha acogido la VI Lección Conmemorativa Clara Campal, que este año ha sido impartida por Victor Velculescu (Johns Hopkins University, Baltimore) bajo el título 'Personalized Genomics Analyses of Human Cancer'. “Es un placer estar en este fantástico hospital y compartir los estudios que estamos realizando en la universidad desde hace años”, ha indicado Velculescu. “Es la persona más relevante en el campo de la medicina personalizada”, apuntó el Manuel Hidalgo, director del Centro Integral Oncológico Clara Campal (Ciocc).
Victor Velculescu, Manuel Hidalgo y Fernando López-Ríos. |
En su intervención, Hidalgo ha explicado que "durante el 2012 hemos seguido creciendo, aportando nuevos conocimientos a la Oncología nacional: “El número de pacientes se ha incrementado mucho, estamos en torno a los 3.000 pacientes nuevos al año. Eso nos hace el hospital más grande de Madrid en cuanto a Oncología”. Otra cifra muy relevante es que el año pasado se trataron en ensayos clínicos a 425 pacientes. “Todavía tenemos un gran reto por delante. Seguimos atrayendo nuevos proyectos, tratamientos para consolidar la trayectoria de medicina multidisciplinar e integradora, que es lo que sustenta el concepto del Ciocc”, añadió el especialista.
Por su parte, Fernando López-Ríos, director del Laboratorio de Dianas Terapéuticas (LDT) del Ciocc, ha pronunciado la conferencia 'CIOCC Programme in Personalize Medicine', asegurando que “está demostrado que cuando se empieza a invertir en conocimientos básicos y de biología molecular, la mortalidad por cáncer empieza a descender”.
Durante su ponencia recalcó que en este momento hay un conocimiento enorme de muchísimos tumores, “pero en el Ciocc hemos trabajado en neoplasias sólidas y conocemos bastante bien las alteraciones moleculares de los carcinomas de pulmón, del cáncer de mama, colorrectal, páncreas, melanoma, etc”. En este sentido, López-Ríos ha mostrado un resumen de todos los fármacos que tienen ciertas aprobaciones, al menos en Estados Unidos, y que van dirigidos contra alguna alteración molecular. “La lista empieza a ser difícil de manejar”, ha recnocido el especialista.
“Nosotros seguimos una idea clásica y estudiamos algunas alteraciones por imunohistoquímica, también usamos mucho la hibridación in situ y la parte con más volumen es el estudio de mutaciones con métodos incluso de secuenciación masiva”, ha señalado López-Ríos. Este último es un proceso mucho más complejo, pero que ha supuesto un cambio cualitativo. “Con la secuenciación masiva somos capaces de estudiar hasta miles de mutaciones en un número variable de genes.”, ha apuntado.
Un aspecto interesante de estas tecnologías de secuenciación masiva es que también sirven para estudiar genes que tradicionalmente eran muy complicados por su tamaño o por otra característica, como es el caso de los genes BRCA1 y BRCA2.
López-Ríos continuó diciendo que “cuando uno ve nuestra cartera de servicios se queda bastante tranquilo porque, según revisiones recientes, tenemos más del 95 por ciento de la lista de posibles alteraciones que serían teóricamente tratables en pacientes con neoplasias malignas. Esto significa que estamos en la buena dirección después de todo el trabajo que hemos realizado en los últimos años”.
El próximo año se espera poder llevar a cabo la idea de diagnosticar a los pacientes con cáncer de mama de una forma muy rápida, en cuestión de 72 horas, con su informe global anatomopatológico y molecular, haciendo un estudio de los receptores hormonales y del gen HER2 de la forma más automatizada posible. “Es un proceso muy ajustado que en su desarrollo tendría casi todas las etapas automatizadas y digitalizadas”, ha declarado el director del LDT.
“Para agilizar todo el proceso necesitamos estar todos muy bien coordinados, por eso es estupendo trabajar en el Ciocc, ya que esto se consigue de una forma muy efectiva”, ha declarado López-Ríos.