La Fundación Miranza nace para atender la salud visual de los vulnerables

Más de seis mil niños visitados en sus escuelas, diagnosticados y con tratamientos integrales a lo largo de diez años, con un parón de dos años por pandemia. Un trabajo constante en la salud oftalmológica en menores en situación de vulnerabilidad que ha permitido no solo hacer diagnósticos precoces sino acompañarles durante la infancia. Bajo el lema "Miramos con el corazón", nace la Fundación Miranza, del grupo de Oftalmología IMO Miranza, con la finalidad de ampliar esta cobertura a todo el territorio nacional.

Los primeros pasos se dieron en Barcelona bajo la Fundación IMO, pero las ganas de seguir ayudando hacen que ahora se quiera impulsar desde otros puntos de España. "Vamos a poder impulsar más y hacer mejor acción social, especialmente dedicada a los niños y a los adultos que tienen situación de exclusión, que no tienen acceso a tratamientos", indica a Redacción Médica el presidente de la Fundación Miranza, Borja Corcóstegui.

Y es que el proyecto busca llegar cada vez a más personas a las que proporcionales servicio oftalmológicos. En lo que va de 2024, han atendido a 250 niñas y niños, y esperan finalizar el año con el doble de diagnósticos y tratamientos. Su intención no termina ahí, quieren llegar aún más lejos y alcanzar a las 1.000 personas, incluyendo a adultos.

Miembros del patronato de la Fundación Miranza en su presentación

Acompañamiento en la niñez

Todo empieza con el diagnóstico. Ana Wert, miembro del Patronato, explicó en la presentación de la Fundación Miranza que, pese a que hay tratamientos frecuentes en los niños como el uso de gafas, el servicio oftalmológico que brindan no se reduce solo a eso. "Los vemos, los diagnosticamos y a partir de ahí empieza todo porque les vamos a dar tratamientos completos", detalla. Wert cuenta que se han entregado alrededor de 1.500 gafas a niños y niñas, y se han realizado tratamientos de cirugía de cataratas, así como cualquier otra patología.

"Si necesita una cirugía de cataratas, un problema de córnea, un problema en la retina, todo lo que han necesitado se ha derivado a las clínicas del grupo y se ha operado, es decir, les damos un tratamiento integral, pero no solo integral, lo damos en el tiempo", señala.

Además, explica la importancia de este acompañamiento en la niñez, debido a que el desarrollo de la visión ocurre en la etapa infantil. "Los niños no nacen viendo, aprenden a ver y eso lo van a hacer durante los primeros años, en la etapa de Infantil y Primaria, que es justo donde nosotros vamos a las escuelas", señaló Wert. En esa línea, dice que en coordinación con las escuelas, hacen un seguimiento de los niños en etapa infantil y también de aquellos niños que podrían presentar problemas oculares detectados por profesores o familiares.

La presentación de la Fundación Miranza contó con la participación del presidente Borja Corcóstegui; la directora de la Fundación, Ana Sequí; Ana Wert, miembro del Patronado; Ángel Sánchez, Director General de ONCE y la presencia telemática de Álex Corretja, embajador de la Fundación, entre otros.