ITA apuesta por la realidad virtual en pacientes con trastornos de ansiedad

ITA ha firmado un acuerdo de colaboración para realizar estudios científicos en los que se contemplará la Realidad Virtual (RV) en pacientes con trastornos de ansiedad y estrés. El objetivo de este estudio es poder evaluar la implementación de esta tecnología en los tratamientos de trastornos de ansiedad y comprobar científicamente sus efectos.

La RV está siendo cada vez más presente en el ámbito de la salud. Muestra de ello es que España se sitúa en el quinto lugar como país en el ranking de aplicación de esta técnica, según el informe elaborado por The App Date.

El sector salud representa el 12 por ciento de los proyectos de Realidad Virtual que existen en España. La aplicación de RV en salud mental es conocida como reality exposure therapy (VRET), y se conoce su aplicación en tratamientos para fobias, tratamientos para mejorar la atención de las personas con TDAH, así como otros aplicativos para tratar la reducción de los trastornos de depresión, entre otros.

Limbix e Ita realizarán un estudio en el que se medirán los efectos de la RV en el tratamiento de la ansiedad y de sus variantes como la agorafobia, así como en otras evitaciones fóbicas como la fobia a las alturas, a los espacios cerrados o a conducir. El equipo de ITA pondrá en marcha este estudio con un grupo de pacientes de la Unidad específica de adultos en Barcelona para tratar la Ansiedad. Los pacientes sujetos al estudio deben cumplir unos criterios médicos que establecerá el equipo clínico.

Dos tipos de resultados 

El objetivo final del estudio es valorar qué mejoras puede suponer el uso de estas tecnologías junto al tratamiento habitual. En caso de obtener resultados positivos, una vez analizados los resultados del estudio, la idea del equipo clínico es hacer extensivo el uso de la RV como complemento de la terapia habitual en todos los centros que forman la red asistencial del grupo ITA.

Para la evaluación del estudio, se tendrán en cuenta dos tipos de resultados. En primer lugar, la aceptación por parte del paciente de la nueva tecnología, junto con la valoración cualitativa de la experiencia con el kit de RV. En segundo lugar, se estudiarán empíricamente los resultados de mejora obtenidos comparando aquellos pacientes que utilicen la RV con los pacientes que sigan el tratamiento habitual.

Antoni Grau, director clínico del grupo ITA afirma que “la implementación de este tipo de tecnología en el tratamiento ha venido para quedarse y cambiará sustancialmente nuestra práctica clínica cotidiana. Sin embargo, la RV, así como otro tipo de tecnologías no representan un tratamiento en sí mismo, sino una nueva técnica que debe enmarcarse en un proceso terapéutico más amplio”.