El Hospital de Dénia acoge una exposición olfativa de Ernesto Ventós

La pérdida del olfato es una de las secuelas del Covid. Una situación que ha puesto de relevancia la importancia de este sentido. Por ese motivo, desde el Hospital de Dénia han querido poner en marcha una exposición donde el olfato es el verdadero protagonista.

En la Sala cuidArt de este hospital se podrá disfrutar de la exposición ‘Gente de narices, narices ingentes’. Se trata de una muestra, formada por medio centenar de piezas de NASEVO acrónimo (nas en catalán y sus iniciales) del coleccionista, perfumista y artista catalán, Ernesto Ventós. La exposición está comisariada por Cristina Agàpito, directora artística de la Fundación Ernesto Ventós.

Ventós, de profesión perfumista, desarrolló un aguzado sentido del olfato, debido a su falta de oído. Para él, el olfato, fue el eje vertebrador del resto de los sentidos: “El primero que nos une al mundo y el que nos guía con todo aquello que nos rodea”. De manera que su colección y obra plástica reclaman una mayor atención a las posibilidades de este sentido y nos permiten adentrarnos en el maravilloso mundo olfativo.

Talleres olfativos para pacientes

Las piezas que se exhiben ahora en Dénia han sido seleccionadas expresamente para el hospital y estarán acompañadas de talleres olfativos dirigidos a pacientes. Se les mostrará la relación de una esencia con una obra de arte concreta, tal y como concibió NASEVO.

Desde el Hospital de Dénia afirman que, durante los seis meses de exhibición de la obra, se realizarán muestreos de distintos olores con el objetivo de activar la memoria y la imaginación de los participantes. “Cabe recordar que el olfato tiene un gran efecto de refuerzo sobre nuestros recuerdos, incluso, superior a la vista y el oído. Los recuerdos olfativos tienen una permanencia en la memoria más larga que la de las imágenes o los sonidos”, explican.