Los profesionales de la clínica destacan la importancia del acompañamiento terapéutico para la calidad de vida

Santiago Pérez, director de la Unidad de Psicología de HLA Clínica Montpellier
Santiago Pérez, director de la Unidad de Psicología de HLA Clínica Montpellier


18 feb. 2025 12:00H
SE LEE EN 5 minutos
El Síndrome de Asperger se caracteriza por dificultades en la comunicación social y patrones de comportamiento repetitivos, sin afectar significativamente el desarrollo del lenguaje ni la inteligencia. Desde 2013 forma parte de Trastorno del Entorno Autista (TEA), lo que ha permitido una mayor inclusión en tratamientos y recursos de apoyo.

“La eliminación del término Asperger generó incertidumbre, pero también permitió una visión más inclusiva y menos fragmentada del autismo”, explica Santiago Pérez, director de la Unidad de Psicología de HLA Clínica Montpellier. El TEA de nivel 1 suele detectarse entre los 4 y 7 años, aunque en algunos casos, el diagnóstico se realiza en la adolescencia o adultez. Entre los signos más comunes destacan la dificultad en la interacción social y en la interpretación de señales no verbales, intereses restringidos y comportamientos repetitivos, sensibilidad sensorial elevada o reducida, dificultad para comprender ironías, dobles sentidos o expresiones figuradas y tendencia a rutinas rígidas.


Diagnóstico y tratamiento


Las personas con TEA de nivel 1 pueden experimentar dificultades en la interpretación de códigos sociales, una alta ansiedad ante cambios imprevistos y retos en la regulación emocional. “El diagnóstico se lleva a cabo mediante entrevistas clínicas, observación del comportamiento y pruebas estandarizadas. El tratamiento del TEA de nivel 1 se aborda desde una perspectiva integradora, con metodologías que buscan fortalecer la autoconciencia, la regulación emocional y la interacción social”, comenta el profesional de HLA Clínica Montpellier.

El abordaje del TEA de nivel 1 requiere la intervención de un equipo multidisciplinar especializado. Cada profesional aporta un enfoque complementario para garantizar un tratamiento integral que cubra las necesidades específicas de la persona con Asperger: desde psicólogos hasta neuropsicólogos especializados en TEA, pasando por psiquiatras en el caso de que exista ansiedad, depresión o TDAH, terapeutas ocupacionales y logopedas para trabajar en integración sensorial y habilidades sociales.

El psicoanálisis relacional, puede ayudar a mejorar la comprensión de las emociones propias y ajenas. Por otro lado, la terapia de integración sensorial es clave para la autorregulación emocional y las intervenciones psicoeducativas y programas de entrenamiento en habilidades sociales. Finalmente, la terapia cognitivo-conductual está orientada al desarrollo de habilidades sociales y el manejo de la ansiedad, mientras que la terapia de integración del ciclo vital (ICV) y EMDR, está enfocada en el procesamiento de experiencias traumáticas vinculadas a la exclusión o acoso.

“Para facilitar la inclusión y bienestar de las personas con TEA de nivel 1, es fundamental que sus entornos familiares y educativos favorezcan un ambiente estructurado y predecible, espacios de expresión simbólica como el arte o la escritura y estrategias de psicoeducación emocional para mejorar la comunicación de sus vivencias internas”, añade Santiago Pérez.


La importancia de la terapia psicológica para su desarrollo y bienestar


La terapia psicológica juega un papel clave en el desarrollo y bienestar de las personas con TEA de nivel 1. Más allá de la intervención en dificultades sociales o emocionales, la terapia proporciona un espacio seguro para comprender y gestionar experiencias personales, fortalecer la identidad y mejorar la calidad de vida. A través de diferentes enfoques terapéuticos, se busca fomentar la autonomía, la autoaceptación y el bienestar emocional.

“Muchas personas con Asperger tienen experiencias traumáticas ligadas a la exclusión o al maltrato emocional, lo que puede generar una organización psíquica basada en la defensa contra el vínculo. El trabajo terapéutico busca restaurar la capacidad de conexión con el otro desde un lugar seguro”, afirma Santiago Pérez.

En la etapa adulta, la inserción laboral de personas con TEA de nivel 1 puede verse afectada por experiencias previas de rechazo. Por ello, las empresas deben apostar por una inclusión real, que no sólo contemple adaptaciones técnicas, sino también una cultura organizacional que valore la diversidad neurológica. Si bien muchas personas con TEA de nivel 1 pueden llevar una vida independiente, pueden necesitar apoyo en la gestión de emociones y en la estructuración de su día a día. La psicoterapia les brinda herramientas para interpretar mejor su mundo interno y potenciar sus habilidades.

“No todas las personas con Asperger tienen altas capacidades, pero es común que desarrollen habilidades sobresalientes en áreas como matemáticas, tecnología, música o arte debido a su enfoque detallado y capacidad de concentración”, explica el psicólogo.


El papel de la familia para las personas con TEA


La percepción del TEA en la sociedad ha evolucionado, generando una mayor conciencia sobre la neurodiversidad. No obstante, persisten estigmas y falta de conocimiento en algunos ámbitos.

“Para las familias que reciben un diagnóstico, el mensaje es claro: este no define a la persona, y con el apoyo adecuado, pueden desarrollar su potencial plenamente. Los profesionales de HLA Clínica Montpellier acompañan a las personas con TEA y a sus familias, ofreciendo un abordaje terapéutico integral que favorezca su bienestar y desarrollo personal”, explica Santiago Pérez.

“Trabajamos desde una perspectiva integradora, donde intentamos dilucidar los recovecos de su miedos e inseguridades. Gracias a un enfoque psicotraumatológico, psicoanálisis relacional y terapias expresivas ayudan a mejorar su integración emocional y con la terapia grupal, pueden fortalecer habilidades interpersonales”, concluye el psicólogo.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.