Conrado Núñez, CEO del despacho de abogados especializado en Derecho Sanitario DS Legal.
Las
reclamaciones médicas son fruto de los "riesgos" que asumen los profesionales. Así lo considera Conrado Núñez, CEO del despacho de abogados
especializado en Derecho Sanitario DS Legal, en esta entrevista recogida en
Redacción Médica. De hecho, según apunta, durante la carrera de un médico es posible tener
cerca de 13 siniestros.
Asimismo, el profesional señala cómo el Covid-19 ha dado la vuelta a las especialidades con más reclamaciones y se ha reflejado un
incremento anormal en Neumología, Medicina Intensiva, Geriatría y Medicina Interna. No obstante, desde el Derecho Sanitario apuestan por poner 'barreras de entrada' para tener protegido al profesional sanitario, por ejemplo, con el consentimiento informado digital.
Por último, Núñez insiste en la
importancia de estudiar los siniestros y utilizar los datos para "anticiparse a las reclamaciones y
preparar unas mejores defensas".
¿Cree que los médicos son conscientes de que ejercer una buena medicina entraña asumir reclamaciones?
Los médicos que llevan en la 'guerra' muchos años, sí. El buen médico es consciente de que ejercer una buena medicina
entrañará riesgos y que alguna de sus actuaciones supondrá el nacimiento de alguna reclamación. Solo así puede ser coherente con su vocación,
avanzar en la medicina y estar cuando hay que estar.
Hoy en día, los médicos hablan de sus experiencias respecto a las reclamaciones que han vivido, ya sea directamente o en su entorno de trabajo. Tener una reclamación no significa haber realizado una
mala actuación médica, sino haber asumido una serie de riesgos, en pro del bien de curación del paciente y de la mejora de la sociedad. Es más, les hemos obligado a asumir riesgos sin que tengan una
red de protección donde poder ampararse.
Hace años que dejó de ser un
tema tabú, entre la profesión médica, hablar directamente de un siniestro de Responsabilidad Civil Profesional. Son muchas las causas por las cuales han aumentado las reclamaciones, por lo que resulta de especial relevancia que los profesionales, entre sus experiencias, enseñen que estas reclamaciones son una realidad que los profesionales están
obligados a soportar, aunque hayan actuado correctamente. Es una liberación contar tus experiencias porque ayuda a mejorar, ya no a la medicina que se ejerce, sino a esos elementos que suelen escaparse a la propia actuación del profesional.
¿Cuál es el futuro de la medicina en términos de incidencia?
Es especialmente necesario tener una
gran capacidad de adaptación a cualquier realidad que nos pueda llegar. Lejos de cualquier predicción, es imprescindible estar preparado para acometer cualquier reto futuro.
Una de las cualidades innatas de un buen ejecutivo, de un líder, es saber
tomar decisiones. Por supuesto que, dentro de ese territorio incógnito y esa esfera de incertidumbre que supone tener un 40 o 50 por ciento de los datos relevantes sobre los que tomar dicha decisión, se hace difícil. No se podría definir mejor a un médico español que en estos términos, ya que la toma de decisiones es diaria y, en circunstancias, que en la mayoría de las veces otras profesiones no tienen por qué acometer.
Un recién licenciado ya sabe que va a tener
entre 2,58 y 10,78 siniestros, dependiendo de la especialidad y tomando como referencia los datos actuales. Si hacemos una extrapolación uniendo frecuencia, tendencia y proyección a 40 años, hablaríamos de un incremento de hasta
13,11 siniestros en su carrera profesional.
"Tener un abogado prescriptor que ayude al médico en su día a día puede evitar reclamaciones"
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¿Cómo podría reducirse esa tendencia?
Nuestra conclusión y lema es:
prevención. Es decir, formarse en aquello en donde inciden más las reclamaciones. En este momento, tener
conocimientos de la parte jurídica de la profesión médica se hace indispensable. Por supuesto, esta formación tiene que ser muy práctica porque las consultas y dudas son muy elevadas.
Nosotros hacemos mucho hincapié en que deben conocer cómo se hace un
buen consentimiento informado o una buena historia clínica. No obstante, somos conscientes de que tenemos que hacer un esfuerzo mayor hasta conseguir que el médico realice esa formación. Otro aspecto importante es poner '
barreras de entrada', es decir, tener herramientas que realmente permitan tener
protegido al profesional sanitario a través de, por ejemplo, el consentimiento informado digital.
Asimismo, el asesoramiento experto, antes de proceder a realizar cualquier actuación, garantiza la oportunidad de
tener un abogado prescriptor que le ayude en su día a día. Durante estos años, hemos tenido la oportunidad de poder asesorar a los médicos mucho antes de que se
produzca una eventual reclamación en la mayoría de los casos. Hemos conseguido el objetivo, pero si finalmente se materializa esa reclamación, tenemos un sólido e importante camino recorrido.
En muchas ocasiones, es casi más importante saber
qué no se debe hacer que lo que se debe hacer, respecto a los aspectos formales, como pueden ser los
apuntes subjetivos en una historia clínica o las consecuencias de no responder a preguntas que pudieran considerarse una obviedad en un consentimiento informado.
¿Cuál es el capital recomendado para un médico?
Nuestra recomendación es aquel que le permita dormir tranquilo y si le llega un problema, no tener que perder el sueño por él. Ssi uno quiere tener la seguridad en su trabajo, el
capital asegurado debería rondar los 3.500.000 euros. Hay que tener presente que entre 700.000 euros y 3.500.000 euros la prima no es proporcional, es decir, la prima muy probablemente
no llegue a duplicarse, mientras que el capital se quintuplica. Merece la pena esa tranquilidad.
¿En qué trabaja Ds Legal actualmente?
Ds Legal se dedica a la
defensa del médico y, personalmente, estoy muy involucrado en cómo mejorarla. En este momento, estamos
estudiando más de 12.000 siniestros con las muestras más relevantes de cada especialidad. El objetivo es, junto con las nuevas tecnologías, poder
anticiparnos en nuestras defensas. Así, podremos ahorrar a nuestros clientes el calvario de tener que pasar por un juzgado.
Nuestros equipos no solo lo forman abogados especialistas en Derecho Sanitario, sino toda una red de profesionales que nos permiten poner
esas barreras de entradas a futuras reclamaciones. Médicos, expertos informáticos, actuarios, auditores y un gran equipo humano que vela por la
salud de nuestros clientes.
Por ejemplo, l
a predicción en Anestesia ofrece unos datos muy relevantes sobre cuándo van a recibir una reclamación. Sorprende ver una acumulación de casos a los 50 años e impacta que la mayor
probabilidad de recibir una reclamación sea a los 60 años, es decir, acercándose a su edad de jubilación. Podríamos aventurarnos a presuponer teorías como que la experiencia hace que fueran más despreocupados o que desarrollen
casos más complejos. Sin embargo, si me fijo en los resultados generales, la mayor probabilidad de recibir una
reclamación está en los 43 años. Por lo que nos queda mucho por estudiar, antes de poder anticipar conclusiones al respecto.
¿Qué especialidades se han comportado peor en el año 2021?
La verdad es que son años locos, donde lo normal es la anormalidad. Estoy sorprendido porque especialidades de poco riesgo han tenido
mucha frecuencia de reclamaciones, como son: Medicina General, Medicina de Familia, Rehabilitación y Oncología y Anatomía Patológica.
En otras especialidades se veía venir un
incremento anormal de reclamaciones, más derivadas de la situación actual de pandemia: Medicina Intensiva,
Neumología, Medicina Interna y Geriatría.
Pero por supuesto, los reyes de la corona han sido:
Cirugía Plástica, Neurocirugía y Traumatología.
"El buen médico tiene siniestros de Responsabilidad Civil profesional y está asumido como parte de su profesión"
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¿Qué espera del año 2022?
Si bien hace 2 años salíamos todos al balcón a aplaudir a nuestros profesionales por todo, ahora es el momento en el que
nosotros luchemos por ellos y la gran injusticia que se produce en nuestra sociedad y el derecho.
Como profesionales, sufren una
persecución indiscriminada en el ámbito penal que busca socavar su confianza, quitarles su profesión y matar su vocación. Durante años, he tenido que soportar cómo ellos son los únicos profesionales que, haciendo bien su trabajo, tienen que someterse a una pena de banquillo porque todos los días
se enfrentan a la muerte y a la enfermedad en milésimas de segundo. Pero, además, no se les da ningún respiro, no se aceptan fallos como al resto de los mortales y se les criminaliza donde a otros se les perdona porque se asume que toda profesión puede llevar aparejados errores, equivocaciones o curva de aprendizaje.
Los médicos son los únicos profesionales a los que les hemos creado mayores obligaciones,
más cargas asistenciales, peores contratos, mayores presiones y, encima, se enfrentan a ser enjuiciados. Creo que debemos recordar que todo médico que atiende a un paciente lo hace por vocación y que, aunque es posible que se equivoque, no era su intención. En caso de equivocarse, existen los seguros, pero no puede
ni debe criminizarse al medico, pues eso solo nos perjudicaría a la larga, tanto a nosotros como a nuestra sociedad.
Como conclusión, podríamos decir que el buen médico tiene
siniestros de Responsabilidad Civil profesional y que, actualmente, está asumido como parte de lo que es su profesión. Lo que sí que no se debería permitir es un uso indiscriminado de la vía penal, ya que en la mayoría de los casos va contra los intereses de la sociedad, al socavar la
confianza de un profesional que no se merece un trato así. Defendamos a nuestros médicos.
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