La prematuridad ha desplazado a la desnutrición como primera causa de mortalidad infantil en todo el mundo.
El
neonato prematuro extremo que se da de alta con vida se sitúa entre los dos perfiles de paciente que más
gasto generan al sistema sanitario público, según han documentado los pediatras en el caso del Hospital La Paz de Madrid y ha dado a conocer a Redacción Médica el vicepresidente de la Sociedad Española de Neonatología,
Miguel Saenz de Pipaon.
“Supera en gasto a intervenciones como el trasplante de médula ósea o las operaciones de corazón, por poner dos ejemplos, y la sociedad debe tener conciencia de la cantidad de recursos económicos, dedicación y seguimiento por parte de médicos y familiares que supone esta clase de paciente”, ha aseverado.
El pediatra Miguel Saenz de Pipaon.
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Se ha de tener en cuenta –argumenta– el
gasto del neonato prematuro no solo en el momento inmediato posterior al nacimiento –los primeros 28 días de acuerdo con el consenso pediátrico–, sino también en el periodo perinatal e incluso en los primeros años de vida debido a infecciones y enfermedades a las que son en especial proclives.
Primera causa de mortalidad infantil mundial
En este contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de difundir el dato de que, en 2015, la
primera causa mundial de muerte infantil fue la prematuridad del nacimiento, información que no ha pillado por sorpresa a los médicos, según explica este pediatra, ya que la literatura científica ha reflejado esa realidad en las últimas investigaciones publicadas en revistas como
JAMA Pediatrics.
De acuerdo con Saenz de Pipaon, la
prematuridad, hoy día, ha desplazado a las infecciones gastrointestinales asociadas a la desnutrición como primera causa de mortalidad en recién nacidos en todo el mundo “probablemente por el esfuerzo realizado en combatirlas y tratarlas”.
Con todo, salvo el caso de los muy prematuros, en el primer mundo –caso de España– los neonatos precoces tienen casi la misma tasa de supervivencia que los nacidos a término.
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